"Mi sueño es el de la patria, el pan y la justicia para todos los españoles, pero especialmente para los que no pueden congraciarse con la patria, porque carecen de pan y de justicia.". JOSÉ ANTONIO
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14 de enero de 2011

Escudos "franquistas"



Leo hoy en ABC que acaban de retirar el escudo nacional vigente hasta 1981 de la fachada del Tribunal de Justicia de Cáceres en aplicación de la infame Ley de memoria histórica, por franquista. No está de más recordar a los poco leídos y menos ilustrados que dicho escudo era el mismo que el de los Reyes Católicos sustituyendo las armas del escudo de Sicilia por las del de Reino de Navarra, añadiendo las columnas de Hércoles, de la heráldica del Emperador Carlos I y añadiendo el lema "Una, Grande y Libre", única y ciertamente osada aportación -ésta última- efectuada por el régimen del 18 de julio al escudo nacional.

Y yo me pregunto, ¿a qué esperan para arrancar la primera página del ejemplar firmado de la Constitución Española?

¡Necios, más que necios!

LFU

20 de diciembre de 2010

Tierra quemada






El sábado, al pasar por la calle del Príncipe, contemplé con enorme tristeza que un grosero cartel del Ministerio de Cultura ocupaba precisamente el lugar de la placa de bronce que recordaba así el discurso pronunciado en el Teatro de la Comedia por José Antonio Primo de Rivera el 29 de octubre de 1933:


"El 29 de octubre de 1933, aquí, en el Teatro de la Comedia, José Antonio convocó a la juventud española para una ilusionada empresa de entrega, de pasión y de sacrificio por una Patria mejor Al grabar en letras de bronce la memoria de aquel acto, el Ayuntamiento de Madrid cumple con fidelidad y con honor el dejar constancia de la fecha fundacional de la Falange Española MCMLXXI "


Era de esperar, me dije. La insobronable dignidad de aquella fecha, el brillo de aquella mañana de otoño, sigue molestando a los muñidores del odio porque les recuerda su inmensa pequeñez. No le han aplicado la Ley de revancha, porque olvidaron incluir en ella que toda huella de grandeza debía ser eliminada del espacio público. Le han aplicado la medida de su odio sectario e iconoclasta. Es la política de tierra quemada que va a predicar con el ejemplo este gobierno mezquino hasta que abandone el poder por la fuerza de las urnas, sabedor de que los que vengan mañana, carecen de valor para restaurar lo destruido.

Termino recordando las últimas palabras con las que aquél joven de 30 años enardeció a la juventud española en una tarde de octubre madrileño. Sólo las balas pudieron callarle, pero su memoria sigue viva en el corazón de muchos españoles.


"En un movimiento poético, nosotros levantaremos este fervoroso afán de España; nosotros nos sacrificaremos; nosotros renunciaremos, y de nosotros será el triunfo, triunfo que –¿para qué os lo voy a decir?– no vamos a lograr en las elecciones próximas. En estas elecciones votad lo que os parezca menos malo. Pero no saldrá de ahí vuestra España, ni está ahí nuestro marco. Esa es una atmósfera turbia, ya cansada, como de taberna al final de una noche crapulosa. No está ahí nuestro sitio. Yo creo, sí, que soy candidato; pero lo soy sin fe y sin respeto. Y esto lo digo ahora, cuando ello puede hacer que se me retraigan todos los votos. No me importa nada. Nosotros no vamos a ir a disputar a los habituales los restos desabridos de un banquete sucio. Nuestro sitio está fuera, aunque tal vez transitemos, de paso, por el otro. Nuestro sitio está al aire libre, bajo la noche clara, arma al brazo, y en lo alto, las estrellas, Que sigan los demás con sus festines. Nosotros fuera, en vigilancia tensa, fervorosa y segura, ya presentimos el amanecer en la alegría de nuestras entrañas."

LFU
















10 de diciembre de 2010

La habitación de Franco



Tuve la satisfacción de contemplar cómo el nutrido grupo que nos acompañaba estaba formado por gente sencilla que no hacía más que alabar la obra de Franco. Concretamente recuerdo a tres señoras extremeñas que le agradecían a Franco su colosal obra hidrográfica y la seguridad social, dos de los logros más evidentes del régimen del 18 de julio. Mayor fue mi alegría cuando constaté que el guía que ilustraba la visita dejaba escapar, en su enorme discreción y prudencia, alguna expresión de la que acaso sólo los muy avezados en francología podíamos interpretar como una identificación plena con el Caudillo. Pero todo esto aumentó mi zozobra, pues era evidente que el gobierno no iba a consentir por más tiempo ninguna clase de regocijo nostálgico en un espacio público.

Relaté a mis hijas la emoción que sentí al estrechar la mano del hombre que salvó a España de las garras del comunismo y la situó entre las primeras potencias industriales del mundo. Pude indicarles el sitio que ocupó su abuelo en el Consejo de Ministros y cómo mi recuerdo más nítido de las palabras que me dijo Francisco Franco es el de "sólo te pido una cosa: que seas tan bueno como tu padre".

Finalmente, tras atravesar el pequeño salón y el vestidor con sus uniformes y condecoraciones, la visita acabó con una sonrisa cuando el guía nos hizo ver que la única contribución que Franco hizo al mobiliario que se encontró en el Palacio -que nunca se varió durante cuarenta años salvo el cuarto de baño que se "modernizó" en 1974,- fueron dos horribles flexos de marcada tendencia vanguardista de los 60, que el General pidió para las mesillas de noche, para poder leer mejor en la cama.

Aquí podéis ver la fotografía de una habitación que quizás nunca más pueda ser vista por nadie, porque un gobierno imbécil, cretino y ridículo ha decidido que los españoles no tienen derecho a conocer su historia.

Estoy seguro de que el Fiscal general del Estado ha ordenado ya practicar diligencias por si la actuación de Patrimonio Nacional tiene encaje en los artículos 321 y 322 del Código Penal que trata de los delitos contra el Patrimonio Histórico.....

Como siempre, la oposición se mantendrá silente. No sé que hubiera ocurrido si en vez de hacer esto con las habitaciones de Franco, se les ocurre hacer lo propio con las de Felipe II en El Escorial, aunque en España, amigo, todo es posible.

LFU

3 de diciembre de 2010

El PP rinde homenaje a Santiago Carrillo




El Partido Popular ha completado esta misma semana, con su explícito apoyo al nombramiento de Santiago Carrillo como hijo predilecto de la villa de Gijón, una serie de actuaciones miserables que son reflejo de la falta de principios y de respeto a un mínimo código de dignidad por lo que se refiere a la historia reciente de España, algunas de las cuales quisiera recordar a continuación:

20 de noviembre de 2002. El PP de la mayoría absoluta apoya en el Congreso una Proposición no de Ley condenando al régimen de Franco.

20 de noviembre de 2001. La Asamblea de Madrid, con mayoría absoluta del PP, rinde homenaje a las Brigadas Internacionales.

17 de marzo de 2006. El PP apoya la condena al franquismo en el Consejo de Europa, sede donde tiene refugio lo más granado de la masonería internacional.

2007. El PP muestra su apoyo a determinados artículos de la Ley de Memoria Histórica, entre los cuales figura en famoso artículo 16 sobre el Valle de los Caídos.

El Ayuntamiento de san Leonardo de Yague con mayoría absoluta del PP retira de la localidad Soriana el monumento al General Yagüe.

El 29 de junio de 2009, el Ayuntamiento de Madrid con el voto favorable del PP retira a Francisco franco los honores concedidos por la Corporación y la medalla de oro del Consistorio.

21 de noviembre de 2008. el Ayuntamiento de Sevilla retira con el apoyo del PP todas las condecoraciones concedidas a Francisco Franco y elimina de su callejero todos los nombres que tuvieran alguna relación con el franquismo (y algunos más, como el de General Merry, héroe de la Guerra de Cuba, sustituido por la insigne Pilar Bardem).

1 de diciembre de 2008. La Diputación de Málaga aprueba retirar todos los honores concedidos a Francisco Franco y a todas las personas que tuvieron algo que ver con el franquismo, con la ausencia de los diputados del PP, que se ausentaron del pleno para no votar en contra.

Que el Partido Popular rinda ahora homenaje al responsable de uno de los mayores genocidios de la Historia de España debe mover a la reflexión a aquellos que quieran prestarle su apoyo en el futuro.

LFU

23 de noviembre de 2010

Martín Villa, ese hombre


Durante cinco minutos -no tuve estómago para más- escuché a Martín Villa y a Santiago Carrillo en el Canal 24 horas de TVE disertar sobre los 35 años de reinado de Juan Carlos de Borbón. Desde luego, Carrillo no defraudó. No ha perdido ni el odio, ni el rencor ni la vergüenza.

Pero el caso de Rodolfo Martín Villa, hoy presidente de Sogecable, es ya patológico. Quien fuera durante el régimen nada menos que Jefe Nacional del SEU(1962-1964), Presidente del Sindicato de Papel, Prensa y Artes Gráficas, Delegado provincial de Sindicatos en Barcelona (1965), Director general de Industrias Textiles del Ministerio de Industria (1966), Secretario general de la Organización Sindical (noviembre de 1969) y Gobernador civil y jefe provincial del Movimiento de Barcelona (1974), además de Procurador en Cortes y Consejero nacional del Movimiento, resulta que era una especie de pardillo que no se enteraba de nada de lo que pasaba, que se creía todo lo que le decían y que acaba de caerse del guindo. Llegó a decir que el se creyó que en el Valle de los Caídos había muertos de ambos bandos (como si esto fuera mentira) y que esto le sirvió de mucho en aquella época, pero que no sabía que se habían llevado los cuerpos «sin autorización de sus familias». Confieso que, al oir esto, sentí náuseas y apagué la televisión.

Todos los cuerpos identificados que reposan en la Basílica de la Santa Cruz fueron llevados a ella con el consentimiento de sus familias. De hecho muchos se negaron a que se llevasen los cuerpos de sus deudos y existe constancia documental de ello. También reposan en el Valle de los Caídos los cadáveres que se encontraban en las fosas comunes de la mayor parte de los Cementerios de España, muchos de ellos no identificados. Lo cierto es que sólo se han recibido 9 peticiones de familias solicitando la exhumación de los restos de su familiar alegando la nulidad del consentimiento prestado cuando reposan allí más de 45.000 muertos, pero parace ser que el Sr. Martín Villa ya ha comprado la versión del señorito que le paga y anoche se ganó de nuevo el sueldo. Qué lástima.

LFU

19 de noviembre de 2010

Testamento


En la víspera del aniversario de la muerte de Francisco Franco, nada mejor que divulgar, de nuevo, su testamento político. El testimonio postrero de fe y de amor a España de quien ha sido uno de los mejores gobernantes de su Historia, por el desarrollo y la paz que logró para nuestra patria.

“Españoles: Al llegar para mí la hora de rendir la vida ante el Altísimo y comparecer ante su inapelable juicio pido a Dios que me acoja benigno a su presencia, pues quise vivir y morir como católico. En el nombre de Cristo me honro, y ha sido mi voluntad constante ser hijo fiel de la Iglesia, en cuyo seno voy a morir. Pido perdón a todos, como de todo corazón perdono a cuantos se declararon mis enemigos, sin que yo los tuviera como tales. Creo y deseo no haber tenido otros que aquellos que lo fueron de España, a la que amo hasta el último momento y a la que prometí servir hasta el último aliento de mi vida, que ya sé próximo.

Quiero agradecer a cuantos han colaborado con entusiasmo, entrega y abnegación, en la gran empresa de hacer una España unida, grande y libre. Por el amor que siento por nuestra patria os pido que perseveréis en la unidad y en la paz y que rodeéis al futuro Rey de España, don Juan Carlos de Borbón, del mismo afecto y lealtad que a mí me habéis brindado y le prestéis, en todo momento, el mismo apoyo de colaboración que de vosotros he tenido.

No olvidéis que los enemigos de España y de la civilización cristiana están alerta. Velad también vosotros y para ello deponed frente a los supremos intereses de la patria y del pueblo español toda mira personal. No cejéis en alcanzar la justicia social y la cultura para todos los hombres de España y haced de ello vuestro primordial objetivo. Mantened la unidad de las tierras de España, exaltando la rica multiplicidad de sus regiones como fuente de la fortaleza de la unidad de la patria.

Quisiera, en mi último momento, unir los nombres de Dios y de España y abrazaros a todos para gritar juntos, por última vez, en los umbrales de mi muerte, "¡Arriba España! ¡Viva España!"

5 de noviembre de 2010

6 de noviembre, día de los Mártires de la Guerra civil española



La Iglesia celebra mañana el día de los mártires de la Guerra civil española, recibiendo al Papa Benedicto XVI en Santiago de Compostela. Las cifras ponen de manifiesto la magnitud de la barbarie: fueron asesinados 12 obispos, más de 4000 sacerdotes, 2365 religiosos, 283 religiosas, y un número difícil de calcular de laicos católicos.

Hoy traigo aquí un ejemplo de familia cristiana propuesto por Benedito XVI, que fue martirizada por el odio y la sinrazón del marxismo.

María Teresa Ferragud, nacida en Algemesí en 1853, fue asesinada en Alzira en 1936 -a los 83 años- tras ver cómo martirizaban a sus cuatro hijas religiosas, que se habían refugiado en la casa familiar al comenzar la Guerra Civil. Los milicianos arrestaron a las cuatro hijas, pero la madre “quiso seguirlas para no abandonarlas” diciendo a los verdugos: “Donde van mis hijas voy yo”.

En 1931 al llegar la República, las 3 primeras hermanas, del Monasterio de Agullent debieron permanecer en su casa dos meses. Regresaron al monasterio hasta la revolución de 1936, cuando nuevamente se refugiaron en su casa de Algemesí, hasta que fueron detenidas el 19 de octubre de 1936 junto con su anciana madre, B. María Teresa Ferragud Roig y otra hija suya religiosa agustina, B. Josefa Massiá, estuvieron en prisión en el convento de Fons Salutis), y fueron asesinadas el 28 de octubre de 1936, día de Cristo Rey. Los milicianos quisieron dejar a la madre, pero ésta se opuso y quiso acompañar a sus hijas para animarlas en la hora suprema. Fueron martirizadas y asesinadas en Cruz Cubierta de Alzira.

La sangre de los mártires es semilla de cristianos.

Bienvenido a España, Santidad.

LFU

20 de octubre de 2010

El Valle de los Caídos, patrimonio de los Españoles

Reproduzco a continuación el artículo publicado hoy en El Mundo (así como su contrapunto). Debo indicar que, por cuestiones de espacio, se han comido los dos últimos párrafos, que se reproducen a continuación:

"El Gobierno de Zapatero -que desde el principio no ha ocultado su carácter jacobino, gobernando en contra de una parte de los españoles- ha dado sobradas muestras de su férrea determinación para impedir u obstaculizar el culto en el recinto como primer paso para cerrar el monumento, y por el momento lo ha conseguido -siquiera parcialmente- con los andamios colocados en la puerta del templo para las obras de “restauración” , hoy paralizadas, de la Piedad que la corona, pues sólo puede acceder a la Basílica quien quiere acudir a la misa conventual de las 11 de la mañana, para lo cual tiene que atravesar diversos túneles, pasadizos y ascensores, que convierten la visita en toda una aventura con el sabor emocionante de la clandestinidad. Es probable –dada la manifiesta ilegalidad con la que se ha procedido- que finalmente los Tribunales le obliguen a reabrir la Basílica, pero cada día que permanece cerrada –y la justicia no es precisamente rápida- es ya una victoria del resentimiento contra el derecho y la libertad.

Debemos exigir de quienes nos gobiernan que pongan su empeño al servicio del futuro de España y dejen para las generaciones venideras el juicio de la historia, huyendo de tentaciones iconoclastas más propias de civilizaciones instaladas en el arcano de la historia. Dejen en paz de una vez el Valle de los Caídos, que es patrimonio de todos los españoles –de los que les gusta y de los que no- y dedíquen esfuerzos y recursos a resolver los problemas que aquejan a una España menguante a la que quieren negarle el futuro precisamente los que se empeñan en aferrarse al pasado."


LFU

18 de octubre de 2010

José Antonio y el memo de Eduardo Mendoza


Aunque más bien debería llamarle mediocre. Acaba de «ganar» un premio tan digitalizado como el Planeta -este año fue "Público" quien filtró el ganador el día antes- porque Lara no sabía de ningún otro postulante que pudiera vender más libros y no ha tardado un minuto para procurarse unos cuantos titulares que le rescaten del olvido. Para Mendoza, José Antonio Primo de Rivera era un memo.

Y se pueden decir muchas cosas de José Antonio, pero llamarle "memo" sólo lo puede hacer un mediocre sin entrañas como Mendoza, que no le llega ni a la suela de los zapatos a un hombre que, sabedor que iba a ser fusilado a la temprana edad de 33 años precisamente por el odio marxista al execrable delito de su ardorosa inteligencia, la madrugada de su último amanecer escribía algo como lo siguiente:

«Ojalá fuera la mía la última sangre española que se vertiera en discordias civiles. Ojalá encontrara ya en paz el pueblo español, tan rico en buenas calidades entrañables, la Patria, el Pan y la Justicia.

Creo que nada más me importa decir respecto a mi vida pública. En cuanto a mi próxima muerte, la espero sin jactancia, porque nunca es alegre morir a mi edad, pero sin protesta. Acéptela Dios Nuestro Señor en lo que tenga de sacrificio para compensar en parte lo que ha habido de egoísta y vano en mucho de mi vida. Perdono con toda el alma a cuantos me hayan podido dañar u ofender, sin ninguna excepción, y ruego que me perdonen todos aquellos a quienes deba la reparación de algún agravio grande o chico.»


No merece mayor desprecio el rufián que el sonoro silencio de una sangre derramada con amor, grandeza y elegancia, palabras ciertamente ajenas al escritor barcelonés.

LFU

28 de septiembre de 2010

Sánchez Dragó y la España de Franco


Al final va a resultar que los nacionalistas van a reavivar la fiesta nacional y Zapatero va a conseguir rehabilitar la memoria del franquismo, a fuerza de tanta infamia, mentira y manipulación. Nunca pensé que Sánchez Dragó pudiese escribir algo así y me alegro de que haya hecho honor a la verdad. Esto no le convierte en franquista, sino en persona honesta a carta cabal. Es curioso que gente que, como él, poco o nada debe a aquél régimen, tengan que salir a decir en voz alta lo que callan tantos otros que todo le deben y a los que se les debería caer la cara de vergüenza.

LFU

«Testimonio ante el juez»

Por Fernando Sánchez Dragó

Publicado en "El Mundo" Lunes, 20 de septiembre de 2010

«SEÑOR JUEZ; quiero prestar testimonio en el proceso abierto contra los crímenes del franquismo. todos los testigos llamados a declarar son de cargo. Yo lo seré de descargo. Le expongo mis antecedentes: en septiembre del 36 pasearon a mi padre en Burgos, mi tío paterno fue condenado a muerte al terminar la guerra y pasó varios años en la cárcel, yo mismo dí con mis huesos en ella, fui detenido en no pocas ocasiones, sufrí cinco procesos, permanecí un total de diecisiete meses en Carabanchel y caso ocho en prisión domiciliaria, estuve seis años en el exilio....¿Le basta con eso? ¿Admite mi testimonio? ¿Me reconoce la condición de víctima del franquismo? ¿Tengo derecho a hablar o me sentará, por parecerle facha, en el banquillo? Le recuerdo que, a diferencia de muchas de las personas llamadas por usted a declarar, mi testimonio no es de oídas.

Soy testigo presencial de los supuestos delitos que se juzgan y de la época en la que se cometieron. No pueden decir otro tanto Almodóvar, Javier Bardem, Juan Diego Botto o Almudena Grandes, y menos aún los bisnietos de las presuntas víctimas. Recuerde asimismo que mis palabras no son fruto de ideología, por carecer yo de ella, ni del afán de medro. “Vengo aquí por la indignación de tanta mentira. Las cosas no fueron como se cuentan” Al contrario: pueden costarme caras.

Nada tengo que ganar y sí mucho que perder. ¿Por qué, entonces, me meto en la boca de lobos que no son feroces, pues con sus plañidos sólo quieren estar cara al sol que más calienta? Se lo explicaré: vengo aquí movido por la indignación que tanta mentira me produce. Las cosas no fueron como sus testigos las cuentan. Yo estuve muchas veces en Correos y nadie me torturó.

Todos los españoles, todos, fueron víctimas de una guerra cuya estúpida crueldad se divide a partes iguales entre los Hunos y los Hotros. Y en cuanto a la posguerra, cierto es que los años del franquismo lo fueron de sombras para algunos, sobre todo al principio, pero también de luces para muchos. Y aun me atrevería a decir, jugándomela, que las segundas fueron más que las primeras. En la España de Franco que conocí sólo sufrían persecución quienes desde posturas radicales -las mías, por ejemplo- y buscando pelea se enfrentaban al Régimen. Créame si le digo que éramos pocos. Mis recuerdos lo son de un país abierto, alegre, divertido y más libre, en lo menudo, que el de ahora. Basta de mentiras. No reabra trincheras. No dé vivas a la República, que lo fue de infamia. Sobresea al asunto. ¿Habeas corpus? Pues aquí está el mío, señor juez. Ecce homo.»

24 de septiembre de 2010

Bono, el rey del pueblo y los nostálgicos del régimen

«Algunos nostálgicos del viejo régimen y la dictadura no os perdonan que os pusierais con vuestro pueblo, pero frente a gente sin importancia, España os quiere con mucha mas fuerza que desprecia a aquellos que quieren que vuelva al Antiguo Régimen»

Han leído bien. Y el autor de la frase no es otro que el inefable Bono, que nunca dejará de sorprendernos.

Cuando España se prepara para entronizar a una pobre hortera desgraciada como «princesa del pueblo», Bono nos ha recordado que Juan Carlos I merece ser recordado como «el Rey del pueblo».

Así que a Juan Carlos lo trajo el pueblo en volandas en contra del «franquismo opresor y cruel» ¿no es así Bono?

Es que no me canso, pasen y vean. Así lo trajo el pueblo contra los «nostálgicos» y así se pronunciaba el Rey del Pueblo contra el «dictador»



"Una figura excepcional entra en la historia. El nombre de Francisco Franco será ya un jalón del acontecer español y un hito al que será imposible dejar de referirse para entender la clave de nuestra vida política contemporánea. Con respeto y gratitud quiero recordar la figura de quien durante tantos años asumió la pesada responsabilidad de conducir la gobernación del Estado. Su recuerdo constituirá para mí, una exigencia de comportamiento y de lealtad para con las funciones que asumo al servicio de la patria. Es de pueblos grandes y nobles el saber recordar a quienes dedicaron su vida al servicio de un ideal. España nunca podrá olvidar a quien como soldado y estadista ha consagrado toda la existencia a su servicio. "

Lo dicho, Bono. Te has vuelto a lucir, machote.

LFU

23 de septiembre de 2010

Memorias de guerra: Divisionario versus Brigadista.



Memorias de un soldado de la División Azul de Jose María Blanch Sabench (año 2010)
La Guerra es Bella de James Neugass (año 2010).


«…Puestos a ver similitudes entre los testimonios que comento, en ambas memorias encontramos un testimonio de heroísmo que no es posible pasar por alto. Una juventud de ambos signos entregó sus años decisivos en la experiencia total que es la guerra y con una exhibición de generosidad, que está por encima de las propias causas que defienden»



Según pasan los años soy más partidario del género memorialista. Especialmente de las memorias de guerra, preferiblemente de soldados más o menos anónimos. No me valen las de generales o estadistas que están llenas de compromisos, cautelas u omisiones interesadas. Asumo con cierto optimismo dos factores inherentes al subgénero que garantizan el interés de todo lector. El primero, la fuerza de un buen argumento está servido, de oficio, por las circunstancias que rodean a toda guerra; como segundo factor, el itinerario del superviviente, sólo por el hecho de sobrevivir, aventura que hay algo extraordinario en su acontecer personal durante la contienda. Lo cierto es que estas dos condiciones no bastan por sí solas para dar empaque a unas memorias, porque toda buena historia necesita ser bien contada, sino, no luce lo que vale y no hay quien la lea, estudiosos aparte.

En el último mes, he podido leer dos libros apreciables de éste género, con algunas semejanzas notables y diferencias no menores. Memorias de un soldado de la División Azul de Jose María Blanch Sabench (año 2010) y La Guerra es Bella de James Neugass (año 2010).

Jose María Blanch Sabench, gerundense de 85 años, con 18 años se alistó voluntario en la División de voluntarios españoles que lucharon con el ejército alemán en el frente ruso en la II Guerra Mundial, conocida como División Azul. Recibió instrucción de artillero y desempeñó funciones como tal, combatiendo en varios frentes. Superviviente de una de las acciones más encarnizadas del frente ruso, la batalla de Krany Bor. Dada su capacidad para los idiomas ejerció también como traductor el alemán y ruso, recibiendo, por ello, formación especializada del ejército alemán.

James Neugass (1905-1948), procedente de una acomodada familia de Nueva Orleans recibió formación universitaria y con 32 se años y se alistó voluntario para ir al cuerpo auxiliar médico de los voluntarios comunistas llamados por Stalin de todo el mundo que lucharon junto al ejercito republicano, las llamadas Brigadas Internacionales. Durante los escasos 5 meses que estuvo en España fue conductor de ambulancias. Estuvo en el frente de Aragón hasta la retirada en 1938 del ejército rojo tras perder Teruel.

Las memorias del Divisionario, escritas recientemente, tienen un tono sencillo. Con objetividad relata los sucesos habituales que tan bien dibujan la rutina del soldado: las marchas de aproximación, los traslados de frente, el contacto con las unidades alemanas circundantes, la ocasional toma de contacto con el enemigo. Tampoco, le falta pulso literario para contar aquello extraordinario y singular. Escueto pero muy emocionante es el relato de la batalla de Krasny Bor en la que hizo gala de un heroísmo sobrio y en el que la Providencia le echó un capote formidable. Resulta curioso, como apenas hay juicios de valor y sí una transcripción fiel de todo aquello que a la impresionable edad de 18 años quedó grabado para siempre en el corazón y memoria del Divisionario: la entrega de los que se alistaron voluntarios; la conexión cordial de los soldados españoles con el pueblo ruso o la extraordinaria organización del ejército alemán. No menos interés, tiene su frecuente trato con los prisioneros del Ejército Rojo. Sin duda, Jose María Blanch tuvo y tiene una mirada libre de prejuicios y un corazón generoso, eso le hizo comportarse con la caballerosidad y nobleza del mejor soldado español. Con 18 años, el idealismo y un afán aventurero le impulsaron a devolver la visita en el año 42 a los comunistas rusos que vinieron en el 36 a España. Sus memorias atestiguan que se hizo hombre siendo soldado en el frente más duro de la II Guerra Mundial.

El relato de Neugass, tiene una marcada vocación literaria y en el mismo se nos revela que la visita a España tenía entre otros objetivos, el de acumular experiencias que le sirvieran para escribir. Sin duda, Neugass tuvo talento para la descripción y una sensibilidad afinada por su origen y estudios, pero la ideología que abrazó lastra de prejuicios su mirada sobre la realidad que presenció y el valor literario del relato. Éste quedó trufado de consignas políticas del momento que el autor machaconamente introduce cuando no narra los sucesos concretos en los que está envuelto. Su visión de la España nacional es maniquea y simplista (Iglesia cómplice del capital, nobleza explotadora, militares fascistas y moros a su servicio…), sus juicios sobre los prisioneros nacionales que fueron asistidos en los hospitales de las Brigadas resultan tan esquemáticos y pueriles que resultan contradictorios con el talento del autor y sólo se explican por el potente filtro y control ideológico que acompañaba a los Brigadistas. En algún momento, sus elogios del espíritu de las Brigadas resultan tan excesivos que suenan a las obligadas declaraciones de ortodoxia del Partido tan frecuentes en esa época. No obstante, sería injusto negar que Neugass tenía una indudable sensibilidad social y humana, y su relato lo trasluce. De hecho, procediendo de un ambiente acomodado, renunció a una existencia acomodada por un anhelo legítimo de reforma social y, equivocadamente, abrazó al comunismo como solución de los problemas sociales. Resulta reveladora una frase de sus memorias, ante la constatación de la dureza de la contienda, se interroga obsesivamente por los motivos de su venida a España y se responde “que no vino por amor sino por asco” a una España, la nacional, que, sin embargo, estaba lejos de conocer. Neugass, por su origen y formación, debió ser un comunista ortodoxo pero algo tibio para la época, que sin embargo creyó en la redención mesiánica de la humanidad que prometía el comunismo sin querer vislumbrar el sendero de destrucción que sembraba a su alrededor. Aventuro que esa es la razón y no otra, la que explica que el texto haya permanecido inédito hasta ahora. Neugass no fue un comunista suficientemente comprometido, no odió sin contemplaciones a su enemigo de clase, así sus memorias permanecieron sin publicar durante tantos años, porque, probablemente, a juicio del mandarín de turno que recibió el texto en su momento, no daban el tono requerido para la propaganda comunista, esa mezcla indisoluble de odio y mentiras.

Puestos a ver similitudes entre los testimonios que comento, en ambas memorias encontramos un testimonio de heroísmo que no es posible pasar por alto. Una juventud de ambos signos entregó sus años decisivos en la experiencia total que es la guerra y con una exhibición de generosidad, que está por encima de las propias causas que defienden. Asimismo, en ambas relatos, se detecta algo natural e inevitable, la sublimación de los recuerdos. Supongo, que es inevitable que la mente humana sólo pueda custodiar lo mejor de la experiencia guerrera, pues el reverso tiene tanta oscuridad que toda mente sana, debe, naturalmente, blanquearla. Asimismo, ambos lucharon con los bandos que perdieron sus respectivas guerras algo que puede ser anecdótico, pero que no lo fue para ellos, en absoluto.

Concluyo confrontando la diferencia esencial entre ambas memorias. Me arriesgo a explicarla por la distinción entre idealismo e ideología, o dicho de otro modo, entre unos valores o ideas que se confrontan con la realidad y los esquemas ideológicos que se imponen sobre la misma y la interpretan deformándola. Esta disquisición puede parecer algo abstracta, pero aventuro que se entiende mejor si uno escruta, mínimanente, la trayectoria vital posterior de ambos. Ambos resultaron perdedores de la contienda. En sus respectivos países, fuera de un breve momento de reconocimiento inicial, sus causas se volvieron indefendibles políticamente, caso de Neugass. Condenadas al olvido, para el Divisionario. Sin embargo, la experiencia de guerra de Blanch, parece resultar claramente un revulsivo, una suerte de catalizador para salir adelante en la empobrecida y convulsa posguerra española y europea, pues su génesis responde al entusiasmo juvenil y al idealismo de una época, libre de una rígida ortodoxia ideológica que la asfixiara. Para Neugass, en cambio su compromiso político comunista en España no encontró acomodo vital en la América de la II Guerra Mundial y en la posguerra posterior, de suerte que ni a sus hijos pequeños les pudo hablar con franqueza de ello. Y no, no fue sólo por la presión anticomunista ambiental del momento como se insinúa en el prólogo (que, por otro lado, empezó prácticamente con la muerte en 1948 de Neugass, al emperzar la guerra de Corea), lo terrible es que la experiencia decisiva de Neugass no pudo amoldarse a las exigencias de la ortodoxia estalinista de la época por su fuerte dosis de subjetividad, pero tampoco a las exigencias de libertad política de su país pues su visión política sectaria despreciaba, profundamente, las bases políticas de la democracia americana, revelando así la letal esterilidad de toda experiencia vital sometida al tamiz rígido de cualquier ideología, la comunista, en este caso.

César Utrera-Molina Gómez.

16 de septiembre de 2010

La ayuda de Franco a los judíos

Hasta tres veces he escrito sobre este tema en Arriba:


http://www.arriba-lfu.com/2007/10/francisco-franco-y-la-persecucin-de-los.html
http://www.arriba-lfu.com/2009/05/la-espana-de-franco-y-la-shoa-ii.html
http://www.arriba-lfu.com/2009/05/la-espana-de-franco-y-la-shoa-ii.html

Pero, ante la contumacia del poder mediático de la izquierda que recurrentemente se empeña en manipular la historia hasta hacerla irreconocible, lo mejor es sacar los documentos que acreditan la verdad de la historia.

Bien están los homenajes a Sanz Briz y a otros diplomáticos españoles, que como el cónsul en Viena Schwartz actuaron decididamente para salvar vidas de judíos en la persecución nazi, asumiendo riesgos personales. Pero resulta mezquino convertir tales homenajes en reproches al Gobierno español, presentando a dichos diplomáticos como outsiders del régimen. Esto es, simple y llanamente mentira.

Como acertadamente destaca la Fundación Francisco Franco en su página el entonces Ministro español de Asuntos Exteriores, José Félix de Lequerica (si tenéis paciencia, no os perdáis la burda manipulación que de su actuación se hace en wikipedia), comunica a nuestro embajador en Washington resultados de la acción española en defensa de los judíos. Y en esta ocasión tiene un aspecto fundamental ya que nuestro embajador está en contacto permanente con el Consejo Mundial Judío, que reside en la capital norteamericana y que está muy atento e interesado por la acción española. En esta comunicación el ministro señala los logros obtenidos en Hungría, actuación tan brillante y esforzada del Encargado de Negocios Sanz Briz “hecha tras insistentes órdenes por nuestra parte”. Bien claro queda la acción decisiva del gobierno en esta comunicación, así como la de fronteras abiertas en España para los judíos, incluso sin papeles, y los roces con Berlín que estas acciones provocaron.

Aquí está el telegrama:




La revista judía The America Sephardi afirma: “en contraste con Inglaterra que cerró las fronteras de Palestina a los judíos que huían del nazismo y la destrucción y en contraste con la democrática Suiza que devolvió al terror nazi a los judíos que llamaban a sus puertas buscando ayuda, España abrió su frontera con Francia ocupada admitiendo a todos los refugiados sin distinción entre los que se encontraban los clandestinos. El Sabat Vayis Cah (22 de noviembre de 1975), los coeditores de la revista acudieron a rezar por Francisco Franco ante el arca de la histórica sinagoga hispano portuguesa y tras mencionar su nombre se añadió la frase “por su ayuda a los judíos durante la Gran Guerra”.

Franco hizo muchas cosas mal en cuarenta años, no cabe duda. Pero en su haber tiene también muchas otras buenas y, desde luego, nadie puede negar la impresionante ayuda humanitaria que prestó al pueblo judío en uno de los momentos más dramáticos de su historia, cuando otras naciones como Inglaterra o Suiza miraban para otro lado. Ya va siendo hora de que lo que reconocen muchos judíos e instituciones hebreas se plasme en un reconocimiento oficial del Estado de Israel. Es de justicia.

LFU

29 de julio de 2010

Muñoz Grandes contesta a Jon Juaristi




«Carta abierta al señor Juaristi»
jueves, 29 de julio de 2010

Desde hace años, leo con atención sus libros y escritos, siempre bien documentados, y muy especialmente aquellos orientados a informar sobre lo que acontece en nuestra querida tierra vasca. El día de Santiago me vi sorprendido por el juicio que emite sobre el ideal por el que luchó la División Azul, afirmando que "desgraciadamente, los divisionarios españoles no lucharon por la liberación de los pueblos oprimidos por el comunismo soviético, sino por el proyecto nazi, que incluía la esclavización de la población eslava y el exterminio de los judíos". Parece que basa su juicio, como "signo incontestable" de la adhesión al régimen nazi, en el solemne juramento de obediencia a Hitler que prestaron "todos los efectivos de la División, desde el General Muñoz-Grandes (mi padre) al último corneta" en el campo de instrucción de Grafenwöhr el 31 de julio de 1941, antes de partir para combatir el bolchevismo soviético en el frente oriental.
Ante tan seria afirmación, que rechazo totalmente, parece necesario que cualquier lector de su artículo conozca el texto íntegro del juramento que aquel día prestó la División, para que pueda formar su propia opinión. Dice textualmente así; "¿Juráis ante Dios y por vuestro honor de españoles absoluta obediencia al jefe supremo del Ejército alemán, Adolf Hitler, en la lucha contra el comunismo, y juráis combatir como valientes soldados, dispuestos a dar vuestra vida en cada instante por cumplir este juramento?"

Pienso que queda suficientemente claro que: 1) El juramento de obediencia se hace a Hitler como Jefe del Ejército en el que la División va a combatir, y no al Jefe del Partido Nazi, término que en ningún momento es usado. 2) La misión de la División se limita a la lucha contra el comunismo. En ningún momento osó Hitler cambiar de frente de combate a la unidad española ni, desde luego, se lo hubieran permitido sus Mandos.

Una última consideración: creo sinceramente que en el año 41 en España se desconocía el proyecto de exterminio del pueblo judío al que hace alusión. Mantengo las esperanza de que algún día nos unamos los españoles para rendir homenaje a todos los que, cualquiera que sea el bando en que militaran, cayeron en combate defendiendo con nobleza sus ideales. Entre ellos incluyo en muy primera línea a los 5.000 valientes que murieron en la estepa rusa.

Un atento saludo.

AGUSTÍN MUÑOZ-GRANDES GALILEA

19 de julio de 2010

La División Azul



Reproduzco a continuación, por su indudable valor la tercera de ABC del sábado 17 de julio firmada por el Comandante General de la Infantería de Marina, D. Juan Antonio Chicharro, Ortega haciendo honor a sus mayores y dignificando su uniforme. Gracias, mi General y un enorme ¡Viva España!

LFU

La División española de voluntarios en Rusia

Leo con gran satisfacción que el Ministerio de Defensa afirma que los hechos que protagonizaron un elevado número de españoles durante la segunda guerra mundial, encuadrados en lo que se conoció como la División Azul, tendrán cabida honrosa en el nuevo Museo del Ejército que se va a instalar en el Alcázar de Toledo. Es obvio que se podrá estar de acuerdo o no con los ideales que empujaron a tantos jóvenes a luchar allí, pero no lo hubiera sido el no reconocer la valentía y arrojo con el que lucharon en una de las epopeyas más grandes de la historia de España y de nuestro Ejército. También lo fue la que personificaron tantos otros en bandos contrarios. Todos eran españoles y todos lucharon y murieron por sus ideales y todosdeben ser recordados. Es la historia de nuestro Ejército con sus luces y sus sombras observadas éstas desde la perspectiva que cada uno quiera tomar, pero con el común denominador de la nobleza en la defensa de sus creencias. Escribo estas líneas, empujado por el impulso sentido ante las noticias que hablaban de la posible no presencia de la División Azul en el nuevo Museo del Ejército.

Mi padre, Juan y otros tres hermanos José, Luis y Antonio Chicharro Lamamié de Clairac se alistaron en 1941 en la División Azul para ir a luchar en defensa de sus ideales contra lo que entonces era la Rusia soviética de Stalin. Dos de ellos, Luis y Antonio, allí quedaron para siempre sumándose a otros dos hermanos que ya habían caído en la guerra de España; el primero de ellos, Luis, piloto de la denominada Escuadrilla Azul, falleció en combate aéreo, y el segundo, Antonio, soldado de la Cia. antitanques divisionaria, en combate cuerpo a cuerpo con fuerzas muy superiores en la defensa de la posición de Urdanik. Los otros dos, Juan y José, continuaron a la finalización de la campaña en el Ejército alcanzando ambos el Generalato. José fue General de División y mi padre Juan fue ascendido al final de su vida a General honorario precisamente por hechos acaecidos en la campaña de Rusia como bien glosó en el momento de imponerle la faja de General el entonces Jefe del Estado Mayor del Ejército, teniente general Pardo de Santayana.

De los dos supervivientes conocí de primera mano la dureza de los combates que allí libró la División Azul ante fuerzas muy superiores en número, que no en calidad; en unas circunstancias difícilmente imaginables.
Los hombres de la División colocaron el nombre de las armas españolas en un lugar sin parangón cercano a la gloria. No me estoy inventando nada. La bibliografía sobre estos hechos es enorme y no sólo la española afín, sino la que puede leerse de numerosos historiadores extranjeros.

Allí murieron en combate 5.000 españoles y más de 17.000 resultaron heridos. Estos son hechos irrefutables que de ningún modo pueden quedar en el olvido.
Pero hay más. Y es algo a lo que quiero referirme, pues es necesario que se sepa, que al igual que sucede ahora cuando son fuerzas españolas las que combaten o participan en operaciones en el exterior, la particular idiosincrasia del soldado español hace que su fiereza en el combate presente una faceta excepcionalmente humanitaria cuando del trato con la población civil o prisioneros se trate. En el frente de la División Azul fueron numerosísimos los prisioneros hechos al enemigo, quienes una vez en poder de los españoles supieron lo que es el trato digno al enemigo vencido; hasta el punto que es bien sabido que el mando alemán reprobó en numerosas ocasiones al mando español por las atenciones habidas con el prisionero ruso.

Y es en este contexto cuando quiero relatar que mi padre, retirado ya del Ejército, en los últimos años de su vida y siendo Presidente de la Hermandad de la División Azul, no tuvo otra obsesión que volver a la tierra donde luchó cuando tenía 17 años para encontrar los cuerpos de sus dos hermanos fallecidos en combate y darles sepultura. Volvió allí 53 años después y en su recorrido por lo que fue el frente de la División Azul tuvo la fortuna de reencontrarse con los ya ancianos rusos que conoció durante la época de la contienda, no sólo con los que se encontraban entonces en el territorio ocupado sino también con aquéllos con quienes combatió frente a frente y a los que Stalin no permitió su regreso a sus lugares de origen 53 años después; los entonces enemigos se encontraron cara a cara.
¿Qué sucedió? Pues simplemente que la confraternización fue la tónica normal . Hay vídeos que tengo en mi poder de estas «xuntanzas» de viejos combatientes —rusos y españoles— que se enfrentaron 53 años atrás con extremada crudeza pero que sabedores de la locura de lo que fue aquéllo estaban dispuestos a todo porque no se repitiera más. Menuda lección para la nuevas generaciones y en especial para aquéllos que no conocen lo que es la guerra y sus efectos.

¿ Puede alguien pensar que hechos así podrían haberse dado de no haber sido los entonces divisionarios, amén de los mejores guerreros, un ejemplo de nobleza y caballerosidad?

No, no merecen estos hombres que su gesta sea obviada y es por éso que leí con gran alegría la falsedad de las noticias que hablaban que el Museo del Ejército les podía olvidar.

En cualquier caso, yo, responsable de la preparación moral de mis hombres, no dejaré nunca, cuando de autoestimularme se refiera, de recordar al General Muñoz Grandes cuando, con temperaturas gélidas y despreciando los tiros, se acercaba a los llamados «guripas» para charlar con ellos y compartir cigarrillos; no dejaré nunca, cuando de implementar liderazgo entre mis capitanes se refiera, de recordar al Capitán Ordás, que al mando de su compañía atravesó las aguas heladas del río Ilmen con 200 hombres para acudir en socorro de una posición alemana aislada; no dejaré nunca, cuando de animar al heroísmo se trate entre mis tenientes, de recordar al Teniente Galiana Garmilla, quien con desprecio de su vida cruzó las líneas soviéticas en apoyo de unidades españolas sitiadas; no dejaré nunca, cuando de animar al sacrificio y al cumplimiento de las órdenes recibidas se refiera entre mis suboficiales y soldados, de recordar las penalidades de un sinfín de defensas numantinas cuerpo a cuerpo a más de 40º bajo cero que soportaron con estoicismo legendario.

Las ideas son discutibles y opinables —faltaría más— pero el heroísmo, el sacrificio, la valentía, el honor y tantas otras virtudes militares que allí se derrocharon son de TODOS. Sí, ya sé por qué escribo estas líneas; me lo está pidiendo mi padre desde el cielo.

JUAN CHICHARRO ORTEGA ES COMANDANTE GENERAL DE LA INFANTERÍA DE MARINA

7 de julio de 2010

De cuando los Reyes celebraban la Victoria

Una buena amiga, que ha heredado tesoros de todo un siglo, me acaba de regalar esta invitación, que no requiere glosa alguna.

Recordando a Cicerón, sólo puedo decir: O tempora, o mores!
LFU

22 de junio de 2010

¿Dios o Bakunin?

(Para leer el documento, debéis "pinchar" sobre el mismo)

Esto lo firmó un Director General de los Registros y del Notariado el 9 de diciembre de 1936, aunque a nadie le sorprendería que el documento fuera del día de ayer.

LFU


P.D. Por cierto, resulta increíble la celeridad con la que se resolvió el expediente. Pinchad y veréis. Razones de urgencia y procedimiento abreviado....

16 de junio de 2010

Me llamo Almudena Grandes y soy una miserable


Confieso que, al escuchar ayer a un periodista dar la referencia del artículo publicado en El País por Almudena Grandes a finales del año 2008, en el que hacía mofa y escarnio de las religiosas salvajemente violadas por milicianos en toda España durante el terror frente-populista, pensé que estaría exagerando.

No pensé, en mi infinita ingenuidad, que alguien medianamente formado fuera capaz, ni en broma, de trivializar y mucho menos de burlarse de hechos tan repugnantes y macabros. Por eso decidí verificar la información en Internet y aún no salgo de mi estupefacción:

«(…)"Déjate mandar. Déjate sujetar y despreciar. Y serás perfecta". Parece un contrato sadomasoquista, pero es un consejo de la madre Maravillas. ¿Imaginan el goce que sentiría al caer en manos de una patrulla de milicianos jóvenes, armados y -¡mmm!- sudorosos? En 1974, al morir en su cama, recordaría con placer inefable aquel intenso desprecio, fuente de la suprema perfección. Que la desbeatifiquen, por favor. A cambio, pueden beatificar a Bono, porque la pequeña vanidad de su implante capilar es pecado venial frente a tamaña perversión.»


No encuentro palabras para describir tamaña mezquindad. Quizás algún lector pueda ayudarme.

No me consta que Almudena Grandes haya pedido perdón por haber escrito esto, pero sé, en cambio, que sigue contumaz y ciega empeñada en reabrir heridas con recientes videos igualmente miserables.

No me consta que el Ministerio de Igualdad haya abierto una investigación por tan repugnante artículo, ni que el Fiscal General del Estado haya abierto diligencias por tal motivo. Tampoco me consta que El País haya pedido perdón públicamente por haber publicado semejante procacidad pese a que Muñoz Molina le dio oportuna réplica desde las mismas páginas del diario socialista.

Sólo espero contribuir, modestamente, a que alguien más conozca lo que yo acabo de descubrir y que algún día, esta mujer miserable –de la que prometo no leer nunca nada más- sienta en su corazón el dolor de la vergüenza y del escarnio público por haber ofendido la dignidad y la limpia memoria de tantas religiosas violadas y asesinadas durante la persecución religiosa de los años 1936 a 1939 por el mero hecho de vestir un hábito y dedicar su vida a los demás.

LFU

15 de junio de 2010

Reforma laboral y Memoria histórica

«Zapatero quiere devolver a los españoles lo que Franco les quitó: ¡las alpargatas

«En cumplimiento de la Ley de Memoria Histórica, Zapatero quiere acabar
con el último vestigio del franquismo: ¡la indemnización por despido de los trabajadores


(Juan Manuel de Prada en el curso de la tertulia de “Las Mañanas de la Cope”. 15 de junio de 2010)

Por cierto, mucho me temo que el abyecto y sectario video realizado por «los de la ceja» con dinero de todos los españoles, acabará volviéndose contra sus autores. La Razón ha empezado y están preparándose documentales muy interesantes.

Mientras tanto, aquí os dejo uno que no tiene desperdicio:




LFU