"Mi sueño es el de la patria, el pan y la justicia para todos los españoles, pero especialmente para los que no pueden congraciarse con la patria, porque carecen de pan y de justicia.". JOSÉ ANTONIO

14 de octubre de 2010

Zapatero. Las razones de un abucheo (II)

Reproduzco a continuación mi comentario de hace un año, pues los argumentos sobre los abucheos los sigo manteniendo de la cruz a la fecha. Únicamente un matiz. El hecho de que se produjeran abucheos durante el toque de oración es intolerable, pero la culpa no fue de los abucheadores -que por su lejanía respecto al escenario del acto no tenían idea de lo que estaba sucediendo en ese momento y sólo respondieron a la mención del Presidente del Gobierno por la megafonía, y además, con efecto "ola"- sino al inmenso perímetro de seguridad que estableció Defensa para alejar lo más posible al pueblo de las tribunas de autoridades. Hubieran bastado un par de pantallas de tv para evitar tan desafortunado incidente en un momento tan solemne, pero el Gobierno ha buscado excusas para echar la culpa a la extrema derecha organizada, lo cual no deja de ser un contrasentido pues como bien dice DAL, no hay nada más ajeno a la organización que la ultraderecha.

Yo este año preferí irme a la playa a descansar. Pero hubiera hecho oir mi voz para pedir la dimisión del Presidente -pitar es que no sé- antes y después. Lo del "protocolo" de la Chacón para "blindar" la fiesta nacional es ya de aurora boreal....

LFU

"Es natural que Rodríguez Zapatero quiera restar importancia a los abucheos que año tras año –desde que accedió a la presidencia- acompañan su llegada y partida de los actos del desfile de la Fiesta nacional del 12 de octubre, relegándolos a la categoría de ritual.

El Presidente –el único, por cierto, en los últimos treinta años que ha sido sonoramente abucheado en tales ocasiones- nunca ha querido serlo de todos los españoles. La tónica de su mandato ha sido la de dividir a los españoles en buenos y malos, reservando la última calificación a los que se resisten a comulgar con las ruedas de molino de sus iniciativas estrella de la memoria histórica, del aborto y de la educación para la ciudadanía.

El público que asiste a los desfiles no es precisamente el adicto a la ideología de género o a la memoria histórica; carece de dudas sobre el concepto de nación en lo tocante a España y quiere y respeta a su ejército y a su historia. No es, por tanto, el perfil del votante del socialismo representado por Zp. Y ese mismo público, que grita Viva España al paso de las unidades militares, y se comporta con dignidad al paso de las banderas de las naciones aliadas, se siente profundamente herido por la insolvencia de un gobernante que ha jugado peligrosa y ligeramente con la unidad de España, que ha socavado los cimientos del estado de derecho cuando le ha convenido, ha tirado por los suelos el prestigio internacional de nuestra patria y ha querido convertir en «criminales fascistas» a la mitad de los españoles que lucharon en nuestra guerra fraticida. Por eso, precisamente, a Rodríguez le dan absolutamente igual, porque sabe que no es más que la manifestación del mismo desprecio que él siente por los que le abuchean.

Ningún otro gobernante ha crispado más a los españoles; ninguno ha reabierto tantas heridas; ninguno ha despreciado tanto a la mitad de España y ninguno ha recibido semejantes abucheos.

Los abucheos, por tanto, son tan comprensibles como merecidos. Pero, ¿es ese el lugar adecuado?. Sin ningún género de dudas, la respuesta es sí. En primer lugar, porque los abucheos se produjeron en la vía pública antes y después del acto en sí -que comienza con la llegada de la Bandera Nacional y la revista a las Fuerzas por parte del Jefe del Estado- y en ningún momento durante su celebración, durante la cual los asistentes mantuvieron una actitud de respeto ejemplar. Si aún así se entendiese que los prolegómenos o momentos posteriores del acto en sí deben tener la consideración de “acto de Estado”, no lo es menos que los desfiles se hacen en la vía pública para solaz y orgullo de la gente y no en un recinto cerrado para consumo de las autoridades. Jamás admitiría ni disculparía un abucheo en un funeral de Estado o en un acto solemne en el que el Presidente esté representando a nuestra Nación. Pero no era el caso. En el desfile de la Fiesta nacional, España estaba representada, primero, por el Jefe del Estado y después, por los representantes de los tres poderes del Estado, pero también por el pueblo para el que se organiza el despliegue de tropas. Y si lo que se quiere es que la gente acuda y aguante dos horas de espera en la calle con mordaza, lo mejor es eliminar los desfiles, pero no se puede pretender invitar a todo un pueblo a celebrar los actos de la fiesta de todos y pedirle que antes y después del acto muestren respeto a quien no sólo no se lo ha ganado, sino que no ha sabido respetar a la gran Nación que representa."

LFU

6 de octubre de 2010

El Abad del Valle de los Caídos demanda al Gobierno por el cierre injustificado de la Basílica


Era una noticia esperada por muchos (Ver aquí). La Comunidad benedictina de la Abadía de la Santa Cruz del Valle de los Caídos con su Abad Mitrado al frente ha interpuesto recurso contencioso-administrativo contra la resolución por vía de hecho adoptada por el Gobierno de la Nación consistente en el cierre de la Basílica pontificia, arbitraria y carente de cualquier clase de justificación.

El incumplimiento por parte del gobierno de todas las promesas formuladas con el intento de dilatar el cierre, han decidido a la Comunidad benedictina, respaldada por el Arzobispado, a tomar esta decisión, que culmina por el momento uno de los mayores episodios de acoso contra una comunidad religiosa del presente siglo en un estado que se pretende de derecho.

Me consta que más de un Abogado del Estado ha pedido que pase de él tan espinoso cáliz, por lo que es de esperar que la defensa del Estado caiga en manos de uno de los «elegidos».

Ojalá se haga justicia, de una vez.

LFU

4 de octubre de 2010

Blood Money

Sabido es que una de las virtudes del maligno -aunque, bien pensado, debería decir "habilidades"- es disfrazar el mal de bien. Así, el aborto se presenta como una medida terapéutica para evitar embarazos no deseados y se le busca el eufemismo de "Interrupción Voluntaria del embarazo" como si al asesinato de niños se le denominase "interrupción voluntaria del crecimiento". Pues bien, la otra cara de la moneda es convertir el bien el mal. Así que si tienes menos de 18 años, pero más de 16 no puedes ver esta película, pero puedes abortar. Esta es la moral del Gobierno de España.

LFU


29 de septiembre de 2010

Aguirre, en favor del «matrimonio» homosexual


Lo leo en La Razón de hoy y, aunque no me sorprende en absoluto, creo que merece la pena dejar constancia aquí para mis amigos «aguirristas» (que también los tengo), pues conviene que también vayan cayéndose del guindo.

Vaya por delante que el recurso del Partido popular no era precisamente una muestra de heroísmo cívico, pues su oposición se basaba más en cuestiones semánticas que de fondo, pero algo es algo, sobre todo si por ahí se evitaba la injusta equiparación de derechos entre el matrimonio, como unión de hombre y mujer y, por tanto, germen de la familia -una de las instituciones básicas y más necesarias de cualquier sociedad- y la unión de personas del mismo sexo, cuya regulación, en su caso, no puede ni debe implicar el disfrute de derechos tales como el de la adopción, obviando de forma irresponsable el derecho natural de cualquier niño a tener un padre y una madre.

Y si por esto me gano el calificativo de homófobo -de dudosa interpretación demántica- qué le vamos a hacer. Yo no estoy en contra de los homosexuales, pues esto sería tanto como estar en contra de la parra virgen, pero sí de que se les reconozcan unos derechos que, por derecho natural, no les corresponden. Al pan, pan y al vino, vino. Aguirre seguramente se ha ganado el premio Chueca, sin tener presente el daño que posiciones «liberales» como la suya puedan hacer. Ahí la tienen.

LFU

28 de septiembre de 2010

Sánchez Dragó y la España de Franco


Al final va a resultar que los nacionalistas van a reavivar la fiesta nacional y Zapatero va a conseguir rehabilitar la memoria del franquismo, a fuerza de tanta infamia, mentira y manipulación. Nunca pensé que Sánchez Dragó pudiese escribir algo así y me alegro de que haya hecho honor a la verdad. Esto no le convierte en franquista, sino en persona honesta a carta cabal. Es curioso que gente que, como él, poco o nada debe a aquél régimen, tengan que salir a decir en voz alta lo que callan tantos otros que todo le deben y a los que se les debería caer la cara de vergüenza.

LFU

«Testimonio ante el juez»

Por Fernando Sánchez Dragó

Publicado en "El Mundo" Lunes, 20 de septiembre de 2010

«SEÑOR JUEZ; quiero prestar testimonio en el proceso abierto contra los crímenes del franquismo. todos los testigos llamados a declarar son de cargo. Yo lo seré de descargo. Le expongo mis antecedentes: en septiembre del 36 pasearon a mi padre en Burgos, mi tío paterno fue condenado a muerte al terminar la guerra y pasó varios años en la cárcel, yo mismo dí con mis huesos en ella, fui detenido en no pocas ocasiones, sufrí cinco procesos, permanecí un total de diecisiete meses en Carabanchel y caso ocho en prisión domiciliaria, estuve seis años en el exilio....¿Le basta con eso? ¿Admite mi testimonio? ¿Me reconoce la condición de víctima del franquismo? ¿Tengo derecho a hablar o me sentará, por parecerle facha, en el banquillo? Le recuerdo que, a diferencia de muchas de las personas llamadas por usted a declarar, mi testimonio no es de oídas.

Soy testigo presencial de los supuestos delitos que se juzgan y de la época en la que se cometieron. No pueden decir otro tanto Almodóvar, Javier Bardem, Juan Diego Botto o Almudena Grandes, y menos aún los bisnietos de las presuntas víctimas. Recuerde asimismo que mis palabras no son fruto de ideología, por carecer yo de ella, ni del afán de medro. “Vengo aquí por la indignación de tanta mentira. Las cosas no fueron como se cuentan” Al contrario: pueden costarme caras.

Nada tengo que ganar y sí mucho que perder. ¿Por qué, entonces, me meto en la boca de lobos que no son feroces, pues con sus plañidos sólo quieren estar cara al sol que más calienta? Se lo explicaré: vengo aquí movido por la indignación que tanta mentira me produce. Las cosas no fueron como sus testigos las cuentan. Yo estuve muchas veces en Correos y nadie me torturó.

Todos los españoles, todos, fueron víctimas de una guerra cuya estúpida crueldad se divide a partes iguales entre los Hunos y los Hotros. Y en cuanto a la posguerra, cierto es que los años del franquismo lo fueron de sombras para algunos, sobre todo al principio, pero también de luces para muchos. Y aun me atrevería a decir, jugándomela, que las segundas fueron más que las primeras. En la España de Franco que conocí sólo sufrían persecución quienes desde posturas radicales -las mías, por ejemplo- y buscando pelea se enfrentaban al Régimen. Créame si le digo que éramos pocos. Mis recuerdos lo son de un país abierto, alegre, divertido y más libre, en lo menudo, que el de ahora. Basta de mentiras. No reabra trincheras. No dé vivas a la República, que lo fue de infamia. Sobresea al asunto. ¿Habeas corpus? Pues aquí está el mío, señor juez. Ecce homo.»

27 de septiembre de 2010

«Latino-americanos»

Foxá, siempre genial, lo dice como nadie:


"Seguramente ha salido de periodistas franceses o italianos la teoría de que los marcianos hablan latín. Acaso maquinan ya el vocablo «latino-marciano» (como hicieron con el «latino-americano») para excluir lo hispano si, como la otra vez, llegamos antes que ellos."

Agustín de Foxá. «Historias de Ciencia ficción». Ed. La Biblioteca del Laberinto. 2009

24 de septiembre de 2010

Bono, el rey del pueblo y los nostálgicos del régimen

«Algunos nostálgicos del viejo régimen y la dictadura no os perdonan que os pusierais con vuestro pueblo, pero frente a gente sin importancia, España os quiere con mucha mas fuerza que desprecia a aquellos que quieren que vuelva al Antiguo Régimen»

Han leído bien. Y el autor de la frase no es otro que el inefable Bono, que nunca dejará de sorprendernos.

Cuando España se prepara para entronizar a una pobre hortera desgraciada como «princesa del pueblo», Bono nos ha recordado que Juan Carlos I merece ser recordado como «el Rey del pueblo».

Así que a Juan Carlos lo trajo el pueblo en volandas en contra del «franquismo opresor y cruel» ¿no es así Bono?

Es que no me canso, pasen y vean. Así lo trajo el pueblo contra los «nostálgicos» y así se pronunciaba el Rey del Pueblo contra el «dictador»



"Una figura excepcional entra en la historia. El nombre de Francisco Franco será ya un jalón del acontecer español y un hito al que será imposible dejar de referirse para entender la clave de nuestra vida política contemporánea. Con respeto y gratitud quiero recordar la figura de quien durante tantos años asumió la pesada responsabilidad de conducir la gobernación del Estado. Su recuerdo constituirá para mí, una exigencia de comportamiento y de lealtad para con las funciones que asumo al servicio de la patria. Es de pueblos grandes y nobles el saber recordar a quienes dedicaron su vida al servicio de un ideal. España nunca podrá olvidar a quien como soldado y estadista ha consagrado toda la existencia a su servicio. "

Lo dicho, Bono. Te has vuelto a lucir, machote.

LFU