"Mi sueño es el de la patria, el pan y la justicia para todos los españoles, pero especialmente para los que no pueden congraciarse con la patria, porque carecen de pan y de justicia.". JOSÉ ANTONIO

1 de abril de 2009

En la muerte de Manuel Cantarero del Castillo


Reproduzco a continuación la necrológica que ayer publicaba el Diario Sur de Málaga, firmada por José Utrera Molina:

"Era mi amigo. También fue mi camarada desde mi más tierna edad, aunque nuestras vidas en ocasiones, discurrieran por vericuetos distintos. Nos conocimos en el colegio de Dña. Ángela, los dos teníamos siete años, habíamos nacido los dos en abril y teníamos por tanto la misma edad. Desde entonces, he tenido con él una profunda y entrañable amistad. Era un tipo irrepetible, un portento de imaginación, un hombre atrevido y audaz pero fundamentalmente una persona buena. Podría relatar muchas anécdotas que me vinculan a él pero me voy a referir a lo más importante. Ambos fuimos Jefes de Centuria, yo mandé la denominada Santa María y Cardenal Cisneros. Él, la que se denominaba Juan de la Cosa, muy entrañada en temas marineros y a su frente recorrió las tierras de Andalucía en una singladura inolvidable. Después anduvo por otros terrenos, pero puedo asegurar que su corazón, su noble corazón jamás dejó de ser falangista. Intentó a través de aquella agrupación denominada Reforma Social Española, extraer las raíces de nuestra doctrina y ponerlas al día. Fue un empeño tan audaz como baldío.

Con el tiempo y adscrito ya al Partido Popular fue diputado europeo. Allí me consta que desarrolló una gran labor, pero al final tropezó con el menosprecio injusto del Sr. Fraga que liquidó sus posibilidades de haber desarrollado allí una tarea que no dudo hubiese sido positiva. Me consta que fue para él un golpe mortal del cual no se recuperaría nunca.

Repito que Manuel Cantarero era una personalidad muy singular. Cuando conoció a su mujer, Hortensia, estaba yo próximo a él y recuerdo que se dirigió a ella y le dijo: “Me parece que me voy a enamorar de ti” y así fue. Durante más de 50 años estuvieron amorosamente unidos. Hortensia le ha cuidado heroicamente durante cerca de nueve años, sin un desmayo, sin una claudicación, sin una queja. Yo asistí a sus bodas de oro cuando ya empezaba su mente a estar lamentablemente demenciada.

Cantarero amó a su patria chica con delirio y con apasionamiento. Fue un malagueño integral. Nosotros convivimos en el Instituto de Málaga y él siempre recordaba los claustros de la Calle Gaona que permanecían todavía metidos en su corazón. Amaba el mar y por ello fue consecuente convirtiéndose en marino mercante. Tenía un sentido poético de la vida y era en definitiva un idealista nato. En ocasiones tuvimos alguna divergencia pero siempre nos unía el amor a las cosas esenciales y yo admiré siempre la firmeza de su talante y la dignidad de sus equivocaciones.

Ya no está con nosotros, a muchos su nombre apenas si le dirá nada, a otros nos habla de un tiempo común, de una comunión irrevocable, de unas esperanzas compartidas, de unas ilusiones insatisfechas, de un edén soñado. Estoy seguro que estará gozando de los aires de los valles tranquilos. Allí le habrá acogido Dios con su infinita misericordia y golpeará su hombro, empujándole para que no deserte de lo que fue su ocupación habitual, la contemplación de las estrellas."


JOSE UTRERA MOLINA

31 de marzo de 2009

Uriarte: El mal pastor


Muy atinado García Barbeito al recordar los versos de Góngora al socaire de las miserables declaraciones del Obispo Uriarte

Cura que en la vecindad
vive con desenvoltura,
¿para qué le llaman cura,
si es la misma enfermedad?

La Iglesia, como obra divina, sobrevivirá a cobardes como el Obispo Uriarte como sobrevivió a los Borgia en el Renacimiento y a otros, pero el daño ya está hecho. La miserable cercanía del clero vasco al nacionalismo y al entorno de ETA es un mal que Roma debería extirpar de raíz, como ha hecho con otros escándalos recientes. Y aquí no vale la doctrina diplomática del mal menor. Es intolerable y repugnante una declaración pública de compasión por la lejanía de los criminales de sus casas cuando hay tantas familias rotas de dolor por el abismo que la muerte ha dejado en sus hogares.

Cuando un pastor compadrea con los lobos y desatiende a sus corderos, el rebaño está condenado a desaparecer.

LFU

30 de marzo de 2009

Derecho a vivir. Éxito de la convocatoria y tibieza de las Cofradías y del Pp





Ayer asistí a la manifestación en favor del reconocimiento del derecho a la vida de los no nacidos. Hubo mucha gente aunque faltaron muchos que debían estar allí, unos por desconocimiento y otros por pereza dominical. Teniendo en cuenta la escasez de medios de los convocantes y la proverbial tibieza acomplejada del Partido popular, la convocatori puede considerarse como todo un éxito y un ensayo general de lo que debería ser una gran manifestación nacional dentro de dos o tres meses.

He leído después las declaraciones del ministro de Sanidad Bernat Soria y en una cosa tengo que darle la razón. No hubo manifestaciones com esta cuando gobernaba el Pp. Es verdad que el Pp no quiso tocar la Ley ni convertirla en una ley de plazos. El asunto le quemaba y prefería dejarlo estar. Pero es verdad que la defensa de la vida no admite medias tintas y que la ley existente es tan mala como la peor y a la vista está el incremento exponencal del número de abortos y las barbaridades cometidas utilizando el cajón de sastre del peligro para la salud psicológica de la madre.

Y lo de las Cofradías ya es de aurora boreal. No vamos a poner el lazo blanco no vaya a ser que la gente nos insulte por la calle y pueda sufrir el patrimonio cultural de la hermandad. Igualito que aquella Virgen de la Estrella -La Valiente-que sus cofrades decidieron procesionar en el año 1932 en medio del olor a Cristo quemado que lamentablemente acompañó al advenimiento de la República. ¿Que las cofradías no deben hacer política? Por supuesto que no. Pero la defensa de la vida no es una cuestión política sino radicalmente humanista y, desde luego, cristiana.

Me alegré de la declaración de las Cofradías en favor de la vida, pero hay que ir más allá. Hay pocas causas que merezcan tanto la pena. Y muy pocas cofradías que puedan llevar con orgullo un título como el de "La Valiente".

LFU

25 de marzo de 2009

Héroes anónimos. Vidas ejemplares



Historias como ésta nos devuelven la fe en el ser humano y en la enorme fuerza del Amor. Nos hace pequeños porque nos enfrenta a nuestra propia miseria. Y puede convertirnos en mejores personas.

LFU

23 de marzo de 2009

Vascongadas: Pronóstico sombrío

Confieso que aún sigo atrapado por ciertas dosis de ingenuidad que lastran cualquier posible análisis político de la situación política actual. Frente a los que a mi alrededor (David, Guillermo, …) sostienen convencidos que Pachi López acabará echándose en manos del PNV, he mantenido hasta ahora mi convicción de que tal estrategia sería letal para Zapatero después de haber proclamado a los cuatro vientos el pretendido “cambio”. Pensaba que el votante socialista entendería mejor la soledad de su partido en el Parlamento nacional por despecho nacionalista que un nuevo contubernio al estilo Benegas que sostenga a Zapatero a costa de mantener maquillado el status quo que desde hace 30 años oprime a los vascos.

Lo cierto es que cada día que pasa mis restos de ingenuidad se resquebrajan y van dejando paso a mayores dosis de realismo que me hacen acoger como más verosímil la postura de los pesimistas. En primer término porque los antecedentes de Pachi López no son precisamente tranquilizadores (fue él quien se encargó de defenestrar a Nicolás Redondo y a todo intento de entendimiento entre los partidos nacionales); en segundo lugar, porque ZP no engaña a nadie y hará al final –máxime en medio de la que está cayendo- lo que más le interese a él y menos a España y porque, en último término, ¿qué hago yo poniéndome en los zapatos de un votante de Zapatero?. El último es, quizá, el mayor error que tengo que reconocer.

Y para colmo de males, el artículo de ayer de Juaristi en ABC (del que sobra la referencia a Onésimo Redondo, que es falsa y de muy mal gusto), vino a apuntillar mis escasas esperanzas.

En todo caso, la esperanza es lo último que se pierde.

LFU

18 de marzo de 2009

La Constitución Española y las termitas


Las termitas, bichos repugnantes y traidores donde los haya, que sólo dan la cara cuando ya es demasiado tarde, han inspirado un buen artículo de Enrique García-Máiquez en el Diario de Sevilla, cuya lectura recomiendo. Podéis leerlo pinchando aquí.


LFU

17 de marzo de 2009

Estupideces de la corrección política

Tengo para mí que D. Ramón del Valle Inclán pudiera, en su delirio, imaginar tamaño esperpento. Lo próximo será que la asociación estatal de meretrices reclame la proscripción del término hideputa y sus derivaciones por menoscabar el crédito de sus legítimos –ya lo son todos en el Código civil- descendientes.

Por cierto, ya va siendo hora de que se exija a esta serie de colectivos así como a los progrepelotas de turno un poco de corrección en el lenguaje. La palabra homófobo no existe –y espero que la Real Academia Española no se baje los pantalones tan fácilmente. El significado de dicho palabro, etimológicamente hablando, sería “temor irracional o aversión obsesiva al igual”. Si lo que se pretende es tratar de denominar al que siente temor o aversión hacia el homosexual, que utilicen la palabra homosexualófobo, aunque no venda.

¡Lo que hay que leer!

16 de marzo de 2009

Las Cofradías de Sevilla, contra el aborto

Las Cofradías de Sevilla, encabezadas en este caso por los hermanos mayores de las Cofradías del Santo Entierro y del Silencio, han decidido pasar de la oración a la acción y enfrentarse públicamente al aborto. ABC de Sevilla viene haciéndose eco de estas iniciativas que deben servir como ejemplo a todas las Cofradías de España que deben huir de su encasillamiento como refugio de capillitas y guardianes de una tradición popular, para convertirse en verdaderos estandartes de la defensa de la fe y de la vida humana.

Desde aquí, como sevillano y cofrade, mi reconocimiento a los promotores de la iniciativa y mi agradecimiento por su ejemplo.

Ojalá que cunda.

LFU

12 de marzo de 2009

Investigar matando

Magnífica entrada de Rafael Ruiz-Gallardón en su blog, que no me resisto a transcribir y a divulgar y que, además, suscribo plenamente:

INVESTIGAR MATANDO.


Señor Obama: Nadie pretende que los científicos y los médicos no investiguen, lo que no se puede autorizar, financiar y permitir es que, para ello, maten, o dañen otros seres humanos, aunque estén congelados (que ya está bien). Investigar matando les puede parecer muy divertido a unos locos, como ya ocurrió en la Alemania nazi, pero a las gentes de bien les parece mal. ¿A usted no?. Entre el congelador y la cámara de gas la diferencia es puramente instrumental.

La guinda es que Estados Unidos está atrasado ya que no puede investigar matando, porque eso supone que otros están avanzados porque que sí matan, lo cual requiere una explicación completa y una denuncia formal ante las autoridades competentes para su investigación, y, en su caso, sanción. ¿No cree?.

Usted se parece mucho a esa desgracia que nos ha llovido del infierno a los españoles, que se llama Rodríguez Zapatero, hasta cuenta con un par de sabios locos – Irving Weissman y Larry Soler -, que han saltado de alegría con su anuncio, y, como el ínclito Bernat Soria y Dª.Bibiana, arderán en deseos de promocionarle para el Premio Nobel del Genocidio.¡Qué cosas!, no se desanime.

Las células madres suenan muy bien, pero son lo que son y lo de matar es serio y no se debe abusar. Las promesas electorales también pueden ser inmorales y, como se decía en el catecismo de Ripalda, uno de los casos en los que no se debe cumplir lo prometido es cuando se prometió una barbaridad, porque prometiendo se hizo el mal.

Que alguien le bendiga y le ilumine. Recuerdos a su mujer, a sus hijitas, y a su próximo perrito de aguas portugués.

11 de marzo de 2009

Alberdi, el aborto y los complejos

Anoche escuché estremecido a Cristina Alberdi -quien ostenta un alto cargo en el Gobierno de Esperanza Aguirre- una encendida defensa del proyecto de ampliación de la ley del aborto. A los argumentos retroprogres de siempre añadió el inédito de que si una joven puede tener relaciones sexuales con 16 años es normal que pueda abortar. Así de crudo y así de bestia. ¿Y si mantiene relaciones con doce, Cristina, qué hacemos?. Edades al margen, lo más triste fue la coda con la que acabó su intervención y que consiguió meter en su cascarón de acomplejados al resto de los contertulios, entre ellos, José Antonio Vera, Edurne Uriarte y Amando de Miguel: ¿Acaso hay alguien que estaría dispuesto a meter en la carcel a una mujer por abortar?. la contestación no se hizo esperar: ¡No por Dios, no se trata de eso!, bla, bla, bla.

Y yo me pregunto, ¿y por qué no?. El código penal está para algo y si una mujer comete un delito, debe penar por ello al igual que cualquier otra criatura. Y no seamos demagogos y nos vayamos a casos extremos en los que, al igual que en cualquier otro delito, existen los atenuantes y eximentes que pueden aplicarse en cada caso concreto. Pero si una mujer decide matar al bebe que lleva en sus entrañas porque le da la real gana, debe ir a la carcel igual que si mata a sus hijos ya nacidos o a su marido o a san pitopato. ¿O es que es más digna de protección la vida del nacido que la del no nacido?

Hay mucho sepulcro blanqueado que no hace más que repetir que el aborto es siempre un drama para la mujer cuando precisamente está convirtiéndose para muchos en un método anticonceptivo y a partir de ahora mucho más. ¡Para quien siempre es un drama es para el bebe que muere en el camino!, por mucho que la OMS y sus secuaces diga que si se le mata antes de la semana 14 no hay problema ninguno.

Lo triste es la falta de claridad y la falta de coraje en la defensa de la vida de quienes ponen el grito en el cielo por l pena de muerte.

Por cierto, no dejéis de leer el artículo de Colón en el Diario de Sevilla.

Y muchas felicidades, querido amigo Nacho.

LFU

9 de marzo de 2009

Más aborto y una tonta peligrosa

Responde al nombre de Viviana o Bibiana -lo he visto escrito de las dos formas- y para nuestra desgracia, es "miembra" del gobierno, pese a no conocérsele mérito alguno más allá de su filiación política socialista. Su ministerio de "Igualdad", creado por la estulticia del infame nos cuesta a todos los españoles un mínimo presupuestario anual de 40 millones de euros, no menos vergüenza y, para colmo de males, el único "proyecto" que ha dado a luz -valga la maldita paradoja- es el de la nueva ley del aborto que hará las delicias de los fabricantes de trituradoras humanas.


No nos engañemos. Con la nueva ley que sacará adelante el gobierno con el apoyo de los grupos "progresistas", lo único que se eliminan son los papeles que hoy hay que firmar para poner en marcha la trituradora. A partir de ahora bastará con decir "vengo a abortar" para que nadie pregunte nada más, siempre que el bebe no tenga más de tres meses y medio. Después, bastará como ahora con rellenar el papelito diciendo que existe peligro para la salud psíquica de la madre, motivos socio-culturales, etc..., para poder matar legalmente al bebe un poquito más mayor. Es decir, se producirá un ahorro de costes en papel y se evitarán las denuncias por abortos ilegales antes de los tres meses y medio, es decir, más ahorro de papel.


La principal y trágica novedad de la ley es que las niñas de 16 años puedan abortar sin autorización de sus padres. Lo ha dicho Bibiana así de clarito: "si pueden casarse, pueden abortar". Pues esto no es así, mameluca. El artículo 45 del Código civil sólo permite contraer matrimonio a las menores emancipadas, pues en otro caso su matrimonio sería nulo (ex artículo 75 del mismo texto legal), así que, siguiendo la tesis de la ministra al menos confío en que tan siniestra facultad se reserve a las menores emancipadas y de esta manera podamos poner coto a tan terrible sangría.


Precisiones legales al margen, que a la ministra bien poco le importan, lo más triste es que una menor que no puede conducir, que no puede votar, que no puede comprar tabaco, que no puede acceder a determinados contenidos en internet, que no puede comprar una cerveza ni consumir alcohol, que necesita la autorización de sus padres para hacer un viaje de ski, pueda sin embargo acudir a una clínica a deshacerse de su bebé con la complicidad del legislador y sin contar con la autorización de sus padres y tutores. ¿Acaso no se trata de proteger a los menores dando por sentada su inmadurez?.


Esto es algo trágico y absolutamente intolerable. Estamos ante una suplantación de la patria potestad por el Estado en una materia sumamente grave y con muchísimas consecuencias de diversa índole para la vida de una menor por las que la Administración -ergo todos los contribuyentes- podría acabar teniendo que responder judicialmente para indemnizar los eventuales daños causados por semejante intervención. Pero no confío mucho en que el principal partido de la oposición se atreva a poner el grito en el cielo tampoco en ese tema. Hay muchos votos en juego y estar en contra del aborto no vende.


Es la sociedad civil la que debe movilizarse contra esta barbaridad. Y yo desde aquí os invito a todos a no desfallecer en defensa de la vida de los más necesitados, los que no pueden valerse por sí mismos, embriones y ancianos, que al parecer no son dignos de protección por esta sociedad tan macabramente "avanzada".

LFU

6 de marzo de 2009

Morante, Tomás y Camino. Un gesto feo




La desabrida reacción de los tres toreros citados ante la concesión a Francisco Rivera de la Medalla de Oro de las Bellas Artes es un gesto feo, presuntuoso e indigno del señorío que se presume a un matador de toros.

Vaya por delante que no soy precisamente un seguidor de Rivera y que creo que la elección de Cultura no ha sido la más acertada. Creí ver en él, de novillero, los mimbres necesarios de un torero de raza, valiente y con ramalazos de arte, pero su evolución posterior me decepcionó, catalogándole desde entonces como torero previsible y anodino.

Pero de ahí a negarle el mérito y el respeto que todo matador de toros se merece, hay un largo camino que desde luego no voy a recorrer. Al contrario de lo que han hecho tres toreros presuntuosos que no tenían necesidad alguna de hacerlo, rompiendo la inveterada tradición de caballeros que siempre adornó a los maestros de la tauromaquia.

¿Qué necesidad tenía Paco Camino a su edad de hacer esto? ¿Acaso se creen Morante y Tomás epítomes del arte de la tauromaquia para juzgar con tal severidad a un compañero?. Espero y deseo que el otro maestro de Camas, que de arte tiene algo que enseñales a los tres ctados, continúe sumido en el más absoluto de los silencios. Será un signo de caballerosidad y no sólo de amistad.

Sólo les falta ir de la manita a Tele5 para acabar de consumar un gesto tan feo como ignominioso, que ha roto una de las pocas tradiciones que se conservaban del señorío español.

LFU


4 de marzo de 2009

Una victoria moral contra un gobierno que desprecia el derecho



La Sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Madrid declarando la nulidad de pleno derecho de la arbitraria decisión de la Ministra de Fomento al retirar la estatua de Francisco Franco de la Plaza de San Juan de la Cruz pone al descubierto la forma de actuar de un gobierno para el que el respeto a la ley tiene los límites de su propio interés.

La Sentencia -que reconoce la catalogación de la estatua como elemento singular con nivel de protección 1 histórico-artístico- en el Plan General de Ordenación Urbana de Madrid, pone en evidencia no sólo al gobierno sino también al resto de las administraciones públicas madrileñas que no movieron un dedo para denunciar la flagrante ilegalidad cometida.

Sólo la Fundación Nacional Francisco Franco, como voz que clama en el desierto, se atrevió a denunciar -en medio del conformismo de la mayoría- la arbitrariedad cometida por la infable Ministra de Fomento. Ahora, cuatro años más tarde, se le da la razón, aunque el Tribunal Superior de Justicia de Madrid parece no atreverse a cargar sólo con el mochuelo de la única consecuencia juridica que conlleva la declaración de nulidad, que no es otra que la obligatoria reposición de la estatua. En primer lugar, el Tribunal no puede suplantar la voluntad del ejecutivo y presumir -aunque no le falte visión de futuro- que el Gobierno volvería a retirarla y que tal retirada es acorde con la Ley de Memoria Histórica (ya que ésta exceptúa claramente los casos en los que exista un interés artístico o histórico protegido por la ley). ¿Y si mañana hay un cambio de gobierno?. Pero además, es que el Gobierno tendría que seguir el procedimiento legalmente establecido para la retirada -que entonces incumplió- y entonces a la Fundación o a cualquier interesado le cabría el derecho a recurrir judicialmente la actuación administrativa, derecho del que la Sentencia está privando a todos los administrados causando una evidente indefensión. El argumento es tan peregrino que hace pensar en que el TSJ de Madrid ha querido mandarle la pelota al Tribunal Supremo, para que se moje.

En cualquier caso, se trata, por ahora, de una victoria moral contra un gobierno acostumbrado a hacer lo que le da la gana sin que nadie le tosa. Pues ahora le han tosido, y parece que bien fuerte.

¿A qué espera Maleni para dimitir?

LFU

28 de febrero de 2009

Homenaje a José Utrera Molina. Málaga, febrero 2009

Lo prometido es deuda. Para los que quisieron y no pudieron estar allí, el sonido y las imágenes de una noche para el recuerdo, que debo agradecer a mi querido sobrino Rodrigo:






27 de febrero de 2009

Memoria histórica de Cataluña




Curiosa placa conmemorativa que dice mucho de la llamada "persecución" del catalán durante el régimen anterior y que sin duda desaparecerá en breve por aplicación de la estúpida Ley de Memoria Histórica.

LFU

25 de febrero de 2009

Su propia medicina



Esto es lo que pasa cuando el Estado hace dejación de sus funciones. El Estado tiene el monopolio del ejercicio de la violencia y el deber de procurar el bienestar y la justicia para sus administrados. Esto es precisamente lo que no sucede en el País Vasco.

La imagen de este joven, no ya valiente, sino temerario teniendo en cuenta el ambiente que le rodea, es la del hartazgo de quien observa desde hace muchos años como quienes ostentan el monopolio de la violencia con el beneplácito más o menos explícito de los poderes públicos son los terroristas de ETA y su brazo político. En esta ocasión, a este joven le han destrozado su casa recién puesta y posiblemente le han arruinado su futuro puesto que ya le han puesto en el punto de mira los asesinos de siempre.

Al final, tendrá que irse de su tierra, pero ha dado una magnífica lección a sus anestesiados vecinos, acostumbrados ya a convivir con el miedo y la amenaza por compañeros inevitables. Porque, al igual que todos ellos, sabe perfectamente quienes son los que ponen las bombas, los que les aplauden y los que les ayudan. Sabe donde toman sus copas y celebran sus sangrientos akelarres protegidos por el miedo y la complicidad de un poder político que rentabiliza sus acciones. Y ha decidido administratles, por una vez, su propia medicina.

Si esta escena se repitiese cada vez que los asesinos golpean con su habitual cobardía, algo empezaría a cambiar en esa tierra tan querida de España.

LFU

23 de febrero de 2009

Garzón y la instrucción del Sumario sobre Pilatos


Como prueba de que el ingenio español no descansa nunca, quiero compartir el chiste que recibí al poquísimo tiempo de hacerse público el vahío del Juez titular del Juzgado de Instrucción nº 5 de la Audiencia Nacional -de cuyo nombre no quiero acordarme- como explicación de su ansiosa indisposición:

Está el juez Garzón, en la soledad y silencio de su despacho de la
Audiencia Nacional, redactando una providencia de 400 folios, cuando,
de repente, se ve interrumpido por un extraño sonido, como de alguien
que chista:

- "Chisssss, chissssss"

Garzón levanta la vista de las cuartillas, pero no puede ver a nadie:
está solo.
Al cabo de unos segundos, se repite el sonido

- "Chisssss, chissssss"

Perplejo, vuelve a extender la vista por todo el despacho: nada,
nadie...
Una tercera vez, se repite el fenómeno:

- "Chisssss, chissssss"

Se levanta de la silla dispuesto a lavarse la cara y entonces se
percata de que el Cristo del crucifijo que preside su despacho ha
soltado una mano y le hace gestos para que se acerque. Garzón,
perplejo, se pone enfrente de él y le oye decir:

- "¿Y de lo mío, qué?, ¿Cuándo procesamos a Pilatos?"


Por cierto, son las ocho de la tarde, a Bermejo lo han dimitido y, que se sepa, su compañero de montería, paradigma de la imparcialidad y del buen gusto en la indumentaria cinegética, sigue en su puesto. Entre tanto, la nación entera, preocupada por su salud, hace votos para que decida de una vez descargarse del enorme peso de la justicia universal que tantos desvelos le provoca y opte por un merecido retiro recorriendo los campos de España con su preciosa gorra de bolchevique.

LFU

20 de febrero de 2009

Barcelona despide a José Antonio

Otro monumento derribado por la furia iconoclasta de la izquierda.

Esta vez le ha tocado en suerte a José Antonio Primo de Rivera, en Barcelona. Un José Antonio tocado -paradójicamente- por la varita putrefacta de la Ley de Memoria Histórica, ya que no tuvo siquiera la posibilidad de ser sospechoso de franquista, represor o contendiente, porque ya se ocupó el gobierno del Frente Popular de fusilarlo "democráticamente" con la debida antelación y arrojarlo a una fosa común.

Un hombre que escribió en el umbral de su muerte el mejor de los testamentos políticos que jamás se han podido leer: "Ojalá fuera la mía la última sangre española que se vertiera en discordias civiles. Ojalá encontrara ya en paz el pueblo español, tan rico en buenas cualidades entrañables, la Patria, el Pan y la Justicia".

Una palabra limpia que no encaja en esta atmósfera turbia, ya cansada, como de taberna al final de una noche crapulosa, que preside nuestra existencia.

Posiblemente su lugar será ocupado, ahora, por otro monumento a Companys que como todo el mundo sabe, era el epítome de la moderación y del respeto al adversario. O mejor, por el torturador Julián Grimau, ejemplo de concordia para los catalanes a muchos de los cuales facilitó el eterno descanso. En todo caso, algo que enaltezca más la pútrida estela de una sociedad mayortariamente envilecida.

Recomiendo la carta que un catalán, Francisco Requena Paredes, ha enviado a diversos foros. Una voz que clama en el desierto para que no pueda decirse que todo es silencio, indignidad ni deserción.

LFU

17 de febrero de 2009

La vida no hará más que revelar la fotografía

"Si formamos a los niños con sencillez, si los hacemos amar las alegrías profundas y elementales, avanzarán por la vida conservando en sus ojos la luz de la vida interior, equilibrada, sin sobresaltos. pero si deformamos su infancia, si los niños han oído o visto demasiado, si los dejamos arrastrar por el torbellino vital, si los años de una niñez en calma no han fortificado en ellos la frágil dicha de su inocencia, entonces su vida será lo que ha sido su infancia y en vez de irritarse ante el desorden, serán ellos mismos desorden. Como sus gustos, sus sentimientos, sus pensamientos, fueron siempre inestables, estarán para siempre a la merced del vendaval d las turbias alegrías que consumen al alma y se escapan de nuestras manos y crean, a expensas del sufrir de los demás, el propio sufrimiento.

Después ya es tarde para cambiar.

No se endereza el arbol endurecido. Todo lo más que podremos hacer para intentar que sea diferente, es podarle. Cuando era joven, hirviente de savia, se le hubiera podido doblar con un dedo experto, orientarle y ayudarle a desarrollarse.

Cuando los niños parece que están jugando y mirando sin más, al gorrión o a la alondra que pasan, cuando comiezan a hablar y a besar, cuando fotografían en su corazón, en su imaginación, el espectáculo exacto que somos los mayores, esa es la hora de poderlos modelar.

La vida no hará más que revelar la fotografía. Los ácidos de la existencia imprimirán en ellos las imágenes hermosas y pujantes o atormentadas y entristecedoras, que habíamos ofrecido a sus ojitos avidos de curiosidad y a su corazón impoluto, como una hoja de papel.

Todo aquello de que les privamos por nuestro orgullo, por nuestra agitación, o ¡ay! por nuestras pasiones, todo ello tendremos que pagarlo cruelmente más tarde, viéndoles inquietos, insatisfechos, el alma sin aliento o arrasada por nuestra grandísima culpa."

De "Almas ardiendo". L. Degrelle (1954). Traducción y Prólogo de Gregorio Marañón.

.....Y leyendo tan hermosas palabras, me acordé de los sujetos que mataron y arrojaron al río a una niña en lo mejor de su vida. Es probable que la vida no haya hecho más que revelar la fotografía de su infancia.

Requiem aeternam dona ei, Domine; et lux perpetua luceat ei.

LFU

14 de febrero de 2009

La carta de Ramón Tejero a su padre

Hoy quiero traer a estás páginas una carta emocionante. ABC acoge hoy la carta que el hijo sacerdote de Antonio Tejero Molina le escribe a su padre con todo el amor y el dolor que cabe en su corazón.

Antonio Tejero fue la facil cabeza de turco de un triste episodio de la historia de España, aún hoy muy lejos de estar aclarado. Cumplió con eficacia las órdenes recibidas creyendo que así prestaba su mejor servicio a su patria. Su comportamiento dentro del Congreso sólo tuvo el borrón de la zancadilla y cuando comprendió que había sido utilizado y engañado, supo afrontar con dignidad y silencio, el castigo y la difamación. Rechazó el dinero y el avión que se le ofreció y sólo pidió para sí toda la responsabilidad para librar a sus oficiales y guardias de una inevitable represalia.

Algún día se demostrará que no sólo fue quien inició la ejecución del golpe sino también -aunque otros se pongan las medallas- quien lo frustró definitivamente al negar la entrada al General Armada al Congreso tras conocer la colorida composición del gobierno de concentración que pensaba presidir.

Pero eso queda ya para la Historia y los historiadores. Ahora, el hombre que ha sido blanco de todos los escarnios, ha recibido el mayor regalo que un padre puede recibir. El amor de uno de sus ocho hijos impregnado en cada una de las palabras de una carta verdaderamente emocionante:

LFU

"Aquel 23 de febrero de 1981, muy temprano, salimos de casa... Yo sabía lo que ocurriría... Sin embargo, el silencio era la expresión más simbólica del cariño que se puede dar a un padre que en esos momentos atravesaba unos de los momentos mas difíciles de su vida. Había vivido momentos de angustia, de terror. Noches en vela, acompañadas de desconciertcadoos en una España que los españoles desconocían. Noches de zozobra que acompañaban a un hombre al cargo de las tierras vascas y con el encargo de acabar con el terrorismo... Muertes sin compasión de manos de ETA, traiciones de ideales, injusticias, quejas de viudas, órdenes para quemar una bandera que, después, fue legalizada y que causó tantos y tantos muertos...

Todo era incomprensible para un joven que creció con el dolor, la inquietud, el temor y el deseo irrefrenable de una España coherente... Ese joven era yo, ahora sacerdote de Jesucristo, pero sin dejar de ser hijo de mi padre, del cual me enorgullezco plenamente. Aquella mañana del 23 de febrero acompañé a mi padre a la celebración de la Eucaristía en la capilla que hay frente a la Dirección General de la Guardia Civil. Momentos de silencio, de oración profunda, de contemplación sincera de un hombre creyente que sabía cuál era su deber, que conocía las órdenes recibidas y que no quería por nada del mundo manchar sus manos de sangre (como así fue). Un hombre de uniforme, de rodillas ante el Sagrario y el altar del sacrificio: mi padre.

Suponía para mí un ejemplo de gallardía que nadie me hará olvidar, el testimonio fiel de un creyente coherente con el juramento que había hecho años atrás... No había palabras, sólo silencio, recogimiento y oración sincera. Al salir de la capilla, con una mirada penetrante -y me atrevería a decir que trascendente-, contempló la Bandera Nacional y, con voz serena, tranquila y gallarda, me dijo: «Hijo, por Dios y por Ella hago lo que tengo que hacer...». Y, con un beso en la mejilla, se despidió de mí. Un beso tierno de padre, pero que también sonaba a despedida: la despedida de un hombre que teme que no volverá a la vida... y eso pensé yo también.

Y, con el gozo de amar a mi padre con locura, volví a mi casa para acompañar a aquella que simbolizaba -en aquel momento y siempre- los valores de la mujer fuerte de la Biblia: mi madre. Esa gran mujer que ha sabido hacer, de su existencia, una entrega victimal y heroica a Dios, a España y a su familia -valores en los que fue educada a lo largo de todo su vida y que sigue mostrando, en el otoño se su existir, con una entrega amorosa a todos nosotros-.

Pasamos la mañana con serenidad... El silencio era la elocuencia de nuestro pesar, mientras que el tiempo se convertía, segundo tras segundo, en el traicionero «reloj» que nos hacía pensar en aquel momento. No sabíamos más ni menos. Realmente, nos dolía España, mi padre y el momento en sí; aunque nos tranquilizaba la certeza, según nos habían dicho, de que el Rey apoyaba y ordenaba tales hechos. Era un acto de servicio más, en un momento crítico, por el cual atravesaba nuestra Patria. Y pasó lo que toda España conoce y lo que los medios transmiten (aunque no con toda la veracidad que debieran). No voy a entrar en polémica... ni quiero, ni debo. Pero sí deseo aclarar algunos puntos que conozco, que siento míos y que viví con intensidad aquella noche. Y deseo hacerlo desde el sosiego, desde la paz que, cada día, me regala Cristo y desde la serena sabiduría de los años que te hacen asentar pasiones y discernir la verdad como realidad de la vida.

No voy a revelar nada del 23F, el silencio de mi padre me obliga a callar. Sin embargo, no puedo dejar en el olvido las grandezas de un gran hombre.

Es por ello que, ante las distintas informaciones y publicaciones de estos días en distintos medios de comunicación, quiero y deseo expresar lo siguiente: mi padre es un hombre de honor, fiel a sus principios religiosos y patrióticos; es coherente y sincero. Es un militar de los pies a la cabeza, consciente de sus responsabilidades, entregado a sus hombres. Es un hombre cumplidor, trabajador hasta el extremo, leal ante el significado de la palabra juramento y fiel al mismo. Es un hombre sereno, sencillo, disciplinado y amante de la verdad. No es violento, ni agresivo. Es templado, sensato, sereno, inteligente y capaz de discernir con coherencia una realidad aparentemente absurda e incoherente como parece que fue el 23F. Es un marido ejemplar. Un padre extraordinario. Un hombre excepcional. Un amigo fiel. Un español honorable y un cristiano sincero y veraz. Mi padre es mi padre. Me duele la falta de información y coherencia. Me duele ver cómo todos aprovechan el «silencio» de un hombre para intentar destruirle... quizá por miedo a su palabra... Me duelen tantos programas y tan poca veracidad...

Quiero a mi padre con locura. Es por ello que ruego y aliento a todos aquellos que creen en la libertad de expresión, para que sean tan audaces y coherentes como para publicar estas pobres palabras que tan sólo manifiestan los sentimientos de un hijo por su padre.

Un hijo que se siente orgulloso de su padre y de que éste se llame: Antonio Tejero Molina.

Ramón Tejero Díez "

12 de febrero de 2009

Caso Eluana. El valor de la vida.

Pensaba escribir sobre el caso de Eluana Englaro. Pero se me ha adelantado Enrique García- Maiquez con su magnífico artículo en el Diario de Sevilla, cuya lectura recomiendo vivamente y que suscribo de la cruz a la fecha. (para los legos en internet, basta con pinchar encima del nombre del autor)

Después, he leido en ABC la carta del padre de una "Eluana" española que confieso me emocionó y quiero transcribir aquí por el extraordinario valor de la misma:

Carta de un padre

«La noticia y la polémica desatada en Italia, con la enfermedad de la joven Eluana Englaro, me ha inducido a escribirle estas líneas. Adelanto que es sólo la opinión de un padre. No pretende polemizar ni menos dogmatizar sobre un tema delicado (quizá de conciencia), y respeto todas las decisiones familiares posibles. Tampoco quiero parangonar el caso de nuestra hija con ningún otro: ni todos los comas son iguales ni siquiera todas las gripes.

El coma de mi hija proviene de una enfermedad eminentemente social, una anorexia, que comenzó a los 15 años (5 años peregrinando por distintas clínicas) y que desembocó en tragedia. Lleva así 17 años; hoy ya tiene 37. No ve, no habla y se mantiene con una sonda nasal. Ha conservado parte de sus sentidos: oye música, la tranquiliza y le gusta. Huele el tomillo y la mejorama, que yo traigo del monte y deshecha los olores fuertes, como la piel de mandarina. Tiene tacto y le gusta que la besemos, que juntemos nuestras caras con la suya y se establezca un flujo de calorcito; que rasquemos con suavidad su cabeza y peinemos su brillante pelo castaño. Le gusta oír nuestras voces a su alrededor, y vuelve sus brillantes ojos negros hacia las mismas. No le gusta sentirse sola. Eso lo sabemos seguro; pero no sabemos más, ni tampoco los neurólogos.

Nuestra economía nos ha permitido hasta ahora cuidarla en casa, sobre todo con la ayuda de su hermana, que la adora. Hace unos meses iniciamos expediente para acogernos a la Ley de Dependencia, hasta ahora sin resultados.

Le hacemos gimnasia, la sentamos en una silla de ruedas, la sacamos para que tome aire cuando el tiempo es bueno. Pero el caso de Eluana Englaro nos ha conmovido.

Nuestra familia jamás le quitaría la sonda a Paula y solo de pensarlo se nos ponen los pelos de punta. No estoy hablando de religión ni de conciencia; estoy hablando de AMOR. Nuestra hija es la reina de la casa; la queremos con delirio, le cantamos villancicos en Navidad y le damos unas gotitas de champán. Este año un puñado de nieve recién recogida, para que sienta el frió en sus manos. Hemos tenido que prescindir de muchas cosas, pero ya no queremos recuperarlas, y menos a costa de nuestra «chiquilla».

Nos ha enseñado a ser felices con menos.

Con mi respeto para todos».

Juan Antonio T. M.

Sólo me queda asegurar que, al igual que el padre que escribe, sería incapaz de retirarle a una hija mía la alimentación que precisa para mantenerse unida a la vida. No estamos hablando de encarnizamientos terapéuticos ni de respiradores artificiales, sino de alimentación. Estamos hablando de un tema mucho más grave en el que los límites comienzan a estar difusos. ¿A partir de cuando y bajo qué circunstancias puede una persona negar su deber de alimentos a otra y dejarla morir con la anuencia de los poderes públicos?. No juzgo a nadie, pero me siento legitimado para alzar mi voz en defensa del verdadero valor de la vida humana que algunos parecen negar a aquellos que sufren graves limitaciones.

Y es que el auge de los "derechos humanos" y del proyecto "gran simio" viene acompañado de un gravísimo relativismo en cuanto al valor de la vida humana propio de las civilizaciones más decadentes.

LFU

8 de febrero de 2009

Málaga y Utrera Molina. Ya no queda recuerdo de tu olvido. (Cena homenaje 6 de febrero de 2009)


La noche del viernes tuvo el sabor intenso de lo irrepetible. Cerca de 600 malagueños respondieron con emocionante ilusión a la llamada de unos cuantos amigos de los de toda la vida, para demostrar a Pepe Utrera, en comunión con el poeta Manuel Alcántara y otros tantos, que Málaga no ha sucumbido a las garras del odio, del rencor y de la ingratitud. Fue el reencuentro de un hombre con la tierra que le vio nacer, que fue testigo de su trayectoria política de servicio a España y de sus desvelos por aquellos que no podían congraciarse con su patria porque carecían de pan y de justicia. El cálido abrazo de un paisaje que fue el de su primer amor y el de su primer dolor.

Fue una noche inolvidable que se encargó de borrar de un plumazo décadas de amargura en las que sólo el cariño de los que nada tenían que agradecer se encargaba de llenar el vacío de un olvido mecido en el viento de la indiferencia. Una noche en la que los que llevamos con orgullo su apellido sentimos de nuevo palpitar el corazón al ritmo de las olas que rompen "en el pecho del viejo acantilado".




Fue un derroche de amor, de lealtades y de lágrimas. Lágrimas de emoción y de alegría por un reencuentro durante tanto tiempo esperado. Y no fue una noche de reproches. Para nadie. A los que quisieron herirle nada les habría gustado más que recibir otro tanto en estériles improperios. Pero su odio sólo ha generado un torrente de cariño arrebatado que se desbordó en una noche mágica, que quedará para siempre en lo mejor nuestro recuerdo.



No quisiera citar a nadie porque sería injusto olvidar a otros. Mis hermanos y yo tenemos desde el viernes una deuda eterna de gratitud con la tierra de nuestros padres, con una Málaga que ayer dejó de ser madrastra para convertirse en una madre amparadora y agradecida. Pero para madres, la mía, que como malagueña ha sufrido más que nadie las espinas de su tierra y que ha vuelto a sentir de nuevo la alegría de sentirse otra vez acorde con su propia sangre.



Nada más. Sólo me queda recoger aquí, para los que no tuvieron la fortuna de estar allí, las palabras de agradecimiento (al menos las que preparó, para servir de base a su discurso) de nuestro padre, y anunciar que espero poder colgar también en breve la película de una noche tan especial.

Un abrazo y mi eterna gratitud para quienes hicieron posible una noche para el recuerdo.


LFU


Intervención de José Utrera Molina

Para dar vida a la vida, Dios ha creado la palabra. Y la palabra es siempre el sostén y la sangre del recuerdo. La palabra se corta en el fuego, se construye en el aire y se edifica en el cristal. Es todo y es nada, pero la palabra hoy a mí, me ha ofrecido el regreso a mi antigua alegría, que empieza concretamente a borrar con fuerza los restos de las penas antiguas.

Las palabras, unas veces te estallan en el corazón de la melancolía y te ayudan a vivir entre otras cosas el trozo lejano y tembloroso de la niñez; otras veces, son el único refugio del sentimiento, cuando la dictadura del silencio termina y en ocasiones constituyen la modesta acción humana que hace marchar las ruedas de nuestra propia historia e impulsar las rutas del camino y pienso que sin ellas no podría liberar mi conciencia que aún se vería atrapada por la pereza, por el vacío o por la nada.

Debo confesar que hablar esta noche supone para mí un penoso sacrificio. Creo recordar que afirmé con motivo de la presentación de la reedición de mi último libro, que yo soy ya un octogenario superviviente con canas y arrugas que comprende que la vejez tiene connotaciones poco gratas o tal vez demasiado tristes que exigen contra nuestra voluntad poner lágrimas donde ayer sólo había palabras, situar temblores donde en el pasado sólo existía la firmeza, cantar la nostalgia desalojando de las estancias del ayer cualquier nube oscura y a veces, sin pretenderlo en modo alguno, certificar la penosa derrota de la esperanza. En definitiva, me acomete sin embargo el temor de que la emoción acabe por ahogar mis palabras y me haga naufragar en el silencio.

No obstante, creo que tengo la obligación de aceptar este riesgo y que comprendo que la palabra, esta especie de aire estremecido, es el único medio adecuado de expresar mi gratitud.

Recuerdo ahora también lo que un filósofo francés escribió en cierta ocasión. Manifestó que había padecido desde edad muy temprana la odiosa esclavitud del agradecimiento.

Yo afirmo por supuesto a una abismal distancia de aquél genio literario lo contrario, es decir, que yo considero la gratitud como la gracia de una intimidad satisfecha, como la refrescante oxigenación de la memoria y el orgullo consolador de un sentimiento. En definitiva, un aire de paz tranquilizante en cuyo seno llegan a desvanecerse los dolores viejos, las amarguras antiguas, los recuerdos ingratos quitándole el lugar a la tentación de la venganza y de la ira.

Y he de empezar por mostrar mi reconocimiento a todos los que habéis acudido a esta cena de hermandad, celebrada en torno a un escrito profundo, definitivo y conmovedor que Manolo Alcántara, -mi gran amigo y mejor poeta- me ha dedicado recientemente con escandalosa y valiente generosidad. Le dije, cuando conocí el contenido de su artículo mágico, sonoro y doliente, que por primera vez me faltaban palabras para demostrarle todo lo que sentía – y era cierto - porque en el extenso diccionario de nuestra Lengua, no llegaba a encontrar aunque mi empeño era muy fuerte, frases y acentos que pudieran mostrar de forma inequívoca cual era la verdadera temperatura de mi sentimiento y el misterioso volumen de todo lo que en su presencia se estremecía en mi interior.

Gratitud a Julián Sesmero, a quien conozco y admiro desde hace muchos años, sobre todo en aquella época en que yo creía en el mar, en las rosas, en la rectitud de los caminos y cuando mi corazón tenía tantos sueños que me parecía imposible que salieran venciendo tantos párpados cerrados y aún no me cercaba la huella miserable de los días ennegrecidos por la maldad entre otras cosas, porque la aurora tenía demasiada claridad y su luz lo abarcaba todo.

Gratitud a tantos amigos y camaradas cuya enumeración haría interminable este acto, pero cuyo recuerdo aún saltan en mi memoria a veces a cada instante, rompiendo mi soledad, con la seguridad de que su aliento con su recuerdo encendido, habrán de acompañarme hasta el último día de mi vida.

Y por último, he de manifestar que la intención de mis palabras que sólo son ya un encuentro con mi sombra, no contienen acusación alguna, no son la expresión de argumentos defensivos, ni tan siquiera el producto de una queja, ni tampoco la señal de un justo rencor y ni mucho menos la expresión tardía liberadora de un oscuro resentimiento o la huella de una agravio contenido -son en primer término, la afirmación de mi identidad-. Soy el que fui y espero que Dios me ayude a no cambiar en el corto espacio que le resta a mi vida. Mi credo es muy sencillo y no me avergüenzo de haberlo ejercido, creo como ayer que la Patria es un destino, que la Nación es una forma de integración histórica y que la política no puede ser jamás objeto de tráfico o juego de mercadería y mucho menos, de oportunismo disfrazado de sonriente y falsa bondad. En definitiva, siempre he pensado que la desgracia de los decadentes es la pérdida de la fe en su propio pasado.

Hubo un tiempo, en que la provincia de Málaga creyó oportuno y generosamente que yo era acreedor de ser hijo predilecto suyo. Las palabras que resonaron aquél día en el Teatro Cervantes pronunciadas por el Presidente de la Diputación, estaban llenas de un afecto exagerado, posiblemente de una gratitud excesiva o de una ponderación de méritos sin apoyos suficientes o lo que es peor, eran el producto de una lisonja acomodaticia. Hoy aquellas palabras, constituyen sin duda el recuerdo de una claridad abandonada. Declaro por tanto que mis palabras -las mías-, no van a descalificar a nadie, puesto que más bien tendría que agradecer que el despojo de que he sido objeto ha producido milagrosamente un efecto contrario.

Las voces que yo creía muertas, han resucitado; las amistades que yo creía perdidas han recobrado una nueva fuerza; las miradas que yo estimaba eran ya indiferentes, han cobrado un fulgor extraño, animado y vibrante; las luces que yo creía apagadas, arden todavía aquí, y Málaga, que estaba alejada del espacio de mis más elevados sentimientos, retorna y su imagen vuelve a mí con sus plazas, sus rincones y sus calles como agarrándose a mi garganta, haciendo imposible incluso, que pueda decir todo lo que ahora siento e impidiendo por tanto, que me estalle el peso del alma en la sangre.

Y es que están aquí en Málaga y sería un grave pecado olvidarlo, las cenizas de mis padres, de mis hermanos, de mis amigos más entrañables y hoy siento que todos ellos me gritan desde sus tumbas y que parecen que se asoman a una balconada irreal y misteriosa, que me reconocen y que me miran y que me ofrecen desde el más allá sus manos invisibles y cordiales con las que me abrazaron tantas veces poniendo en vilo mi emoción y mi entereza. Siento pues, que tantos muertos no han desaparecido del todo y que el mar que en alguna ocasión yo creía que había perdido su color, de verlo y sentirlo tan lejano y oscuro, se vuelve hoy azul y transparente, cuando el viento en la copa de los pinos hace oír de nuevo el ruido de las olas. El aroma del aire que yo creí desvanecido, invade mi alma y llena de gozo todo mi ser completando y resumiendo el perfil de toda una vida. Los montes, que cercan el espacio del acontecer de esta tierra y que yo en mi infancia, recorrí tantas veces, se alzan sobre sus sombras, mientras que sus viejas piedras me saludan reconociéndome otra vez y llamándome familiarmente por mi nombre.

Creo pues, que amo profundamente a mis raíces y a mi tierra, con las que hoy me reconcilio. Confesar un amor, es siempre una ventura del alma porque a veces el hombre cree que ama y luego advierte entristecido, que sólo se quedó en la promesa de hacerlo. Yo aquí, ante vosotros, proclamo mi amor por Málaga, que ayer tal vez fuese maltratado y hoy lo hago en viva comunión con mi mujer, junto a ella, que siempre supo hacer el milagro de convertir mi desesperación en esperanza, mis muchas sombras en luces iluminadoras, mi paso cansado por la edad, por la fatiga y por el desengaño, por un vigor nuevo. Ella ha contribuido a que yo pudiera subir los caminos empinados de lo imposible, sin mirar hacia atrás, sin apoyarme en bastón alguno recogiendo el eco de las voces que parecían perdidas en el mañana.

En esta noche malagueña que sin duda marca un hito en la azarosa historia de mi vida, próximo ya a conocer otras fronteras y menos años, os doy las gracias a todos, singularmente a mis hijos, a mis nietos como no podía ser de otro modo y singularmente a mi yerno Alberto que me ha ofrecido con generosidad su abrazo, su entendimiento y su paz y como en tantas ocasiones se ha mostrado como un admirable ejemplo de caballerosidad y de dignidad inigualable y esto lo ha hecho aquí, junto a mí, en Málaga, en la Málaga que pobláis todos vosotros y que se alza esta noche ante mis ojos como fuente de su viento, como encendida realidad de mis sueños recobrados y que representa una cuerda mágicamente anudada entre el amor de ayer y la dicha de hoy y que resuena fuertemente en mi corazón junto al eco de las viejas campanas, cuyo sonido no se ha extinguido aún, aquellas que yo personalmente hice sonar con mis manos en la antigua iglesia de la Victoria, mi vieja parroquia, en los días limpios y lejanos de mi infancia primera.

4 de febrero de 2009

Como el cemento armado



Esta es la cara dura del infame, hace tan sólo un año, engañando sin inmutarse con tal de ganar las elecciones. Los ecalofriantes y trágicos datos del paro del mes de enero y las sombrías perspectivas económicas de España para los próximos años ponen al descubierto su desverguenza y la absoluta impotencia del ejecutivo ante una situación a la que en absoluto es ajena. Y la prueba está en el resto de los paises de nuestro entorno. Lo triste es que las encuestas nos demuestran que, todavía hoy, hay muchos millones de compatriotas que siguen dispuestos a creerle....lo que nos confirma que, como dice mi querido Gabirol, ZP no es sino el síntoma de una sociedad enferma y anestesiada.

LFU

2 de febrero de 2009

La España insolidaria


No me cuento entre los ingenuos que pensaban que el Tribunal Supremo frenaría las ansias (des)moralizantes del gobierno que padecemos, a través de la inicua asignatura denominada “Educación para la Ciudadanía”. Desde la desdichada Ley Orgánica del Poder Judicial de 1985 que retorcía ad nauseam el artículo 122.3 de la Constitución, socialistas y populares se han servido de dicho poder del estado a su antojo sin el más mínimo rubor. El fallo del Tribunal Supremo es, por tanto, un reflejo de la lamentable politización de la justicia al servicio de la mayoría parlamentaria.

Pero el problema no es solo la existencia de una ley injusta –que lo es, no ya porque contravenga el derecho de los padres contenido en el artículo 27.3 de la Constitución, sino por que además se contrapone a la ley natural- sino la absoluta falta de solidaridad de una gran parte de la sociedad católica española que ha preferido mirar para otro lado, mientras unos cuantos miles de españoles decidían actuar en consecuencia con sus principios optando por la objeción de conciencia. Me refiero a quienes desde la tranquilidad de tener a sus hijos a buen recaudo en colegios privados y centros concertados de carácter religioso, han seguido la cobarde e insolidaria estrategia de la FERE: Estad tranquilos, que nosotros daremos la asignatura conforme a nuestro ideario. Eso, y a los que tienen la desgracia de tener que llevar a sus hijos a la escuela pública, que les vayan dando.

Este tipo de actitudes son muy propias de esa España que se deja avasallar y absolutamente inimaginable en la España “progresista” que no duda en echar mano de la insumisión, si hace falta, por muchísimo menos. Es difícil entender que en un tema tan grave como el de la educación de nuestros hijos, haya tanta gente que haga dejación de su responsabilidad y decida meter los pies en el brasero mientras contempla indiferente cómo echan a los leones a la mayor parte de los niños de la sociedad en la que sus hijos van a tener que vivir.

!Flaco favor le estamos haciendo a nuestros hijos si aguantamos impasibles que la mayor parte de su generación sea presa del nefasto adoctrinamiento preconizado por el infame!. Al final, como decía ayer Juaristi en un magnífico artículo, no nos quedará otro recurso que la desobediencia civil.

LFU

29 de enero de 2009

Pax marxista

"El significado de paz es la ausencia de oposición al socialismo."

Karl Marx (no lo sabe usted bien D. Carlos......en España gozamos hoy de una verdadera pax
marxista)

"la crisis actual demuestra la debilidad del capitalismo y otorga actualidad a Marx".
"Yo no trabajo, yo milito"

"yo hago dinero para servir a mis ideas"

Jaime Roures, ex militante de la Liga Comunista Revolucionaria y de la IV Internacional, Presidente de Mediapro y vocero del infame, en su patética entrevista al diario Liberàtion.

(Sin comentarios)

LFU

27 de enero de 2009

De cojos y mentirosos

Confieso que ayer cometí el imperdonable error de desperdiciar algo de mi tiempo contemplando la infame verborrea de nuestro presidente en televisión española. Digan lo que digan, me quedo con su respuesta balbuceante al espectador progre-radical que le acusó de vender armas a Israel con las que se estaban matando niños pelstinos. Con aplomo bastante descriptible, y tras adornarse con algún rodeo, contestó más o menos que "el importe de la venta de armas a Israel no es significativo, no más de un millón de euros" y que "los datos de los que disponemos me permiten afirmar que en estos ataques no se ha utilizado armamento español". ¡Y quedóse tan ancho!

No sé por qué pero algo me dice que resulta inverosímil que en los contratos de ventas de armas entre España e Israel -hoy ya se ha aclarado en algún medio que ascienden a 4 millones de euros- se establezca como cláusula de salvaguarda el que éstas no se utilicen contra los palestinos. Es algo así como venderle armas a los talibanes prohibiéndoles que las utilicen contra Estados Unidos. Y algo me dice que ZP se echó un presidencial pegote al decir que la información de la qu disponía le permitía afirmar que las armas españolas no se habían utilizado. Seguro que es mentira, y como antes se coge a un mentiroso que a un cojo, espero que los periodistas hagan biensu trabajo.

Aunque, a decir verdad, de nada servirá, a la vista de la interminable lista de monumentales mentiras que no le han pasado la más mínima factura.

Una pérdida de tiempo.

LFU

23 de enero de 2009

Málaga y Utrera Molina (y VII). Debate en Ardales


Hace algunos días, con ocasión de una entrada sobre el Presidente de la Diputación de Málaga, Salvador Pendón, refería como dato curioso que éste fuera destituido de la Alcaldía de Ardales –de la que había sido titular desde 1987- gracias a una moción de censura presentada por Izquierda Unida que contó con el apoyo del tercer grupo con representación en el consistorio, los dos concejales de Falange Auténtica.

Pues bien, hace pocos días, tuve la fortuna de leer la carta que el portavoz del grupo falangista en el Ayuntamiento de Ardales, D. Francisco Ortiz Lozano dirigió a mi padre refiriéndole la defensa que habían hecho de la trayectoria de José Utrera Molina en el pleno del Ayuntamiento del 29 de diciembre pasado y el debate que a continuación se produjo entre Salvador Pendón y él.

El gesto de por sí era emocionante y la intervención de este modesto concejal de Ardales, de una nobleza y valentía sublime. Junto con mi hermana Reyes, decidimos escribirle para mostrarle nuestro agradecimiento y recibimos una carta primorosamente escrita de la que quiero resaltar un párrafo:

He recibido carta de vuestro padre, cuyo dulce y al mismo tiempo solemne verbo, sin dejar por ello, paradójicamente, de ser un tratado de sencillez y concisión, ha logrado emocionarnos a mí, a mi mujer (de humildísima familia de jornaleros y apolítica), a mis hermanos y a los camaradas a quienes se la he leído. Si él dice que guardará mi carta porque no hay título (honorífico, político) comparable a las letras que le envié, yo tengo que decirle que por la misma razón guardaré su carta con el mismo respeto con el que se abraza contra el corazón un códice; entre mis papeles más queridos; y que enseñaré a mis dos hijas, con esa carta como documento y como ejemplo, lo que es la grandeza de la amistad, el cariño y la camaradería...

A continuación, paso a transcribir el texto de la intervención del Sr. Ortiz Lozano en el Pleno del Ayuntamiento de Ardales del 29 de diciembre de 2008 y del debate mantenido a continuación entre el Sr. Ortiz y el Sr. Pendón:

3) Sobre el señor José Utrera Molina.

“Siendo la Diputación un organismo supramunicipal, este grupo municipal de Falange Auténtica desea hacer uso dentro del turno de Ruegos y preguntas para manifestarse totalmente en contra de que la Diputación le haya retirado los títulos honoríficos, dignamente ganados, al ex-ministro malagueño José Utrera Molina. Si en el pleno de la Diputación, José Utrera Molina, que ahora tiene 82 años, no tiene representación para tener la oportunidad de defender su inmensa labor, ni tampoco ningún diputado ha tenido el coraje de hacerlo, ni pudieron opinar ninguno de los miles y miles de españoles en general y de malagueños en particular que se beneficiaron con su trabajo vocacional por el bien público, este grupo municipal de Falange Auténtica, tiene a honra defender públicamente su persona, gracias a nuestra representación en el municipio malagueño de Ardales.

José Utrera Molina no participó en la guerra porque entonces era un niño, y en su vida política, como subsecretario y como ministro, entre los años 1969 y 1975, sólo destacó, ni más ni menos, por su ingente cantidad de trabajo al servicio del pueblo. Resumidamente:

Extendió y aumentó notablemente los beneficios de la Seguridad Social a los trabajadores del mar, mejorándolos a los del campo;

Promovió varias leyes en pro de la justicia social y la seguridad e higiene;

Promovió la construcción de viviendas gratuitas y de protección oficial al ritmo realmente vertiginoso de inaugurar 2.500 viviendas diarias durante varios meses, erradicando la mayor parte del chabolismo en Sevilla y Málaga (desapareciendo el chabolismo de El Ejido y de las playas de San Andrés), y disminuyéndolo en gran medida en Madrid y Barcelona, pasando 90.000 familias de las chabolas a habitar las nuevas casas en muy poco tiempo;

Aumentó la aportación del Estado a todo tipo de asistencia social;

Edificó residencias sanitarias de la Seguridad Social hasta no quedar ni una sola capital sin ellas;

Se realizaron bajo su iniciativa innumerables cursos gratuitos de PPO (Promoción Profesional Obrera) a lo largo y ancho de cientos o miles de pueblos, incluido Ardales;

Creó numerosas universidades laborales con becas de gratuidad para hijos de obreros y construyó numerosos institutos de BUP de nueva planta;

Creó el Plan de Prevención de Accidentes Laborales cuando eso no existía en España;

Abordó, junto al ministro Licinio de la Fuente, el primer intento, aunque fallido, de reconocimiento a la huelga en muchísimos años;

Aumentó el papel decisivo del trabajador en los convenios laborales con la Ley de Relaciones Laborales;

Promovió la Ley del Suelo para proteger el derecho a la vivienda;

Promovió la restauración y embellecimiento de pueblos y ciudades con su arquitectura en peligro mediante el plan “Bajo un nuevo sol, cien pueblos de España”;

Obligó a un mayor control de las construcciones con la ley de Calidad de las edificaciones;

Creó numerosos polígonos industriales en varias ciudades, entre ellas, el aumento y terminación de tres polígonos en Málaga (Alameda, Cártama y Guadalhorce), y tres polígonos en Sevilla;

Y, por último, desde su área se promovió la Ley de Igualdad Jurídica para la Mujer, que por fin le reconocía personalidad decisiva en los actos contractuales, de compraventa y en todo tipo de escrituras notariales, sin tener que depender del permiso del marido o del padre, y que fue aprobada a principios de 1975.

Nos mostramos en desacuerdo con esta visión de la Memoria Histórica demostrada por la Diputación, pues los casos de cada persona deben estudiarse en consonancia a los hechos y no al sectarismo. Las personas que actuaron y trabajaron pública y políticamente durante el franquismo no tienen que ser condenadas por esa sola circunstancia.

Así no se superan los enfrentamientos del pasado, sino que se mantienen y se prolongan. Esta forma de entender la Memoria Histórica, además de injusta, es muy peligrosa. Porque así tampoco valdrían, por ejemplo, los premios literarios concedidos durante 40 años. O también habría que censurar a todos los alcaldes de Ardales durante el franquismo que tanto dieron y gratis por su pueblos, como Francisco Sánchez Andrade, Antonio Zurita Martín, Domingo Lería de la Rosa o José Núñez León, por poner unos ejemplos. O también habría que quitarle el título de heredero a título de rey y el título de príncipe concedido a nuestro actual Rey en 1969.

El escritor Juan Manuel de Prada ha escrito sobre Utrera Molina:

“Los malagueños .../... recordarán que fruto de esos desvelos es el impulso de la Seguridad Social en su provincia, la fundación de residencias de ancianos, la lucha contra el chabolismo, la institución de una Universidad Laboral...”

El periodista Antonio Burgos ha escrito:

“Sevilla se caía.../... (y Utrera Molina) se dedicó a apuntalarla. Pero con nuevas viviendas, miles y miles de viviendas. No viviendas "dignas", que ya sabemos lo que eso significa, sino hermosas viviendas, barrios enteros de espléndidas viviendas. Estaba convencido de que la mejor manera de dignificar a las personas era dándoles un hogar. Se entregó a ello con tal entusiasmo que ahí está la Sevilla actual, que ya se ha olvidado de aquella Sevilla cochambrosa de los años 60”.

Y el eminente poeta y periodista Manuel Alcántara ha dicho estas palabras, con la que queremos terminar nuestro ruego:

“¡Qué razón tenía don Gregorio Marañón cuando me dijo que «las guerras civiles duran un siglo»! Hace falta que se liquiden tres generaciones para que la llamada «memoria histórica» no chorree sangre. Pero él (se refiere a Utrera Molina) no es culpable de nada, porque le bombardearon la infancia. Mira, Pepe: te podrán quitar los honores, pero no el honor.”.”
. . . . . . . . . . . . . . . . . . . .

A continuación, tuvo lugar un debate entre el Portavoz del Grupo Municipal Socialista –y Presidente de la Diputación provincial de Málaga-, Salvador Pendón y el portavoz de Falange Auténtica, D. Francisco Ortiz Lozano:

El portavoz del grupo municipal socialista, Salvador Pendón, pidió la palabra para, en primer lugar, decir que esta intervención podría haberla hecho el Sr. Ortiz mediante una carta al director de un periódico, pero no en un ayuntamiento, porque no entiende qué tiene que ver una decisión de la Diputación en este pleno, si no es por encontrarse él presente y realizarse en referencia a que él, además de concejal de Ardales, es presidente de la Diputación.

La segunda cuestión planteada por Salvador Pendón fue la de decir que no niega, ni criticó en la Diputación, los posibles méritos del señor Utrera Molina, pero que en aquellos años que van de 1969 a 1975, cuando éste visitaba Málaga, acudía al edificio de la Aduana, y es muy probable que mientras estaba arriba, en los calabozos de abajo la policía de una dictadura que mató a miles de personas, torturaba a los luchadores por la libertad en un clima de terror policial. Y que aunque Utrera Molina no participara directamente en esto, obtuvo sus honores en una dictadura que ejercía el terror, pues simplemente impedir la libertad es ejercer el terror.

Y por último, Salvador Pendón replica que más valdría que se reivindicara la memoria del presidente de la Diputación republicano que fue asesinado por los fascistas y la recuperación simbólica, al menos, de la memoria de los funcionarios republicanos que fueron represaliados.

Casi textualmente, el portavoz de FA le contesto: “Traer este ruego a un pleno de Ardales no es por lo que dices. Lo hago en el ayuntamiento de Ardales porque nuestro partido, que es un partido pequeño, no tiene representación en la Diputación ni en otro municipio. Pero es que además entendemos que la Diputación no es un órgano de gobierno ajeno a lo municipal, como pueda ser una consejería que surge de la Junta de Andalucía o de un ministerio del gobierno de la nación, sino que la Diputación es un órgano supramunicipal, surge de abajo a arriba de los ayuntamientos de la provincia y va de arriba a abajo en muchas de sus funciones; por lo tanto consideramos perfectamente legítimo poder manifestarnos en este ayuntamiento que forma parte de la Diputación malagueña”.

El Sr. Pendón no repuso nada a dicha intervención.

Por parte del Portavoz de FA, Sr. Ortiz Lozano: “No mezcles unos tiempos con otros. Unos eran los de la guerra y la posguerra, en los que efectivamente hubo terror, torturas y matanzas por parte y parte; y otros muy diferentes los del período 1969-1975, en el que no digo que no hubiese algún caso aislado de lo que se dice, pero en cualquier lugar de España y, sobre todo, en Málaga, yo que tenía 12 años en 1969 y 18 en 1975, y me acuerdo perfectamente, no existía ese clima de terror policial que tú estás describiendo ni nada parecido, y menos cuando con ello se podría manipular la opinión del público joven de este pleno. En cuanto a que la falta de libertad era ya terror, lo mismo podría decirse ahora, cuando una persona del PP, en el País Vasco, no puede llevar a cabo con normalidad un mitin en la calle ni en un local porque son pisoteados y golpeados, cuando no peor, matados; o cuando alguien de Ciutadans de Catalunya no puede hacer propaganda porque son linchados por los separatistas, en un clima total de indefensión”.

El Sr. Pendón contesta que ahora las fuerzas de orden del Estado defienden al que va a manifestarse y detiene a los agresores.

El Sr. Ortiz le contesta: “No siempre ni mucho menos”.

Y finalmente, concluye el Sr. Ortiz: “Efectivamente, sí sería recuperación de la Memoria histórica la reivindicación y la devolución de la dignidad de aquellas personas de ambos bandos que, si de verdad eran víctimas inocentes, fueron matadas simplemente por sus ideas o cargos. En eso estaríamos totalmente de acuerdo. Pero eso no es lo que se está haciendo. La Memoria Histórica la entendéis como puro y duro sectarismo: como esto de tomar represalias, de hecho o sobre el papel, contra personas que no intervinieron en actos violentos y que sólo destacaron por su trabajo y honestidad, como José Utrera Molina”.

Y no hubo más intervenciones en este asunto.

A Francisco Ortiz Lozano y a Miguel Ángel Anaya Vera, bravos concejales de Ardales, mi admiración y mi profundo agradecimiento.

LFU

21 de enero de 2009

Dios vive en América





Mientras en el viejo –y casi podrido- continente nos debatimos entre si Dios existe o no y si nos debemos preocupar o no por Su existencia; se fomenta el laicismo y se reniega de las raíces cristianas de Europa, se promueve la eliminación de los crucifijos de lugares públicos y se expulsan los belenes de la fiscalía general del Estado, y se proclama sin rubor que el concepto de nación es discutido y discutible, los Estados Unidos de América dieron al mundo una lección de patriotismo y falta de complejos absolutamente colosal.

¿Se imagina alguien a un Presidente del Gobierno español acudiendo ostentosamente a misa antes de la investidura, rezando un padrenuestro minutos antes, haciendo ocho referencias a Dios en su discurso y terminando el mismo con un Dios bendiga a España?. Los medios tardarían segundos en crucificarle arrinconándole en el fanatismo y la carcoma religiosa.

No sé que nos deparará la era Obama. Muy probablemente las desmesuradas expectativas que se han puesto en él hagan que esté llamado a decepcionar; aunque no olvidemos que parte de una situación tan mala, que mejorar no resulta difícil. Pero de lo que no hay duda es que ni Obama ni cualquiera que le suceda pondrá en solfa jamás el concepto de nación ni apartará a Dios de su discurso, porque esa clase de complejos aún no hemos sido capaces de exportarlas los europeos.

Ayer sentí una envidia sana de esa gran nación y una pirandeliana angustia por la suerte de nuestra decadente civilización. Y a pesar de todo, el infame que padecemos -que no sabe cómo esconder la terrible estampa de su falta de respeto hacia la bandera de los Estados Unidos- sigue pensando que Obama es de los suyos…. ¡O tempora o mores!

LFU

19 de enero de 2009

El lobo y la cordera

Tras el regodeo mediático de El Mundo con las sugerentes fotos de Soraya, cabe preguntarse qué es más grande, si la candorosa y sorprendente ingenuidad de la posante o la refinada maldad de Pedro Jota. Y es que hay veces que la tierra no es suficientemente grande para esconder la cerviz..

LFU

16 de enero de 2009

Manual de urbanidad y buenas maneras (I)




Hace unos años, buceando entre los fondos de una librería de viejo, me hice con un libro vetusto titulado "Manual de urbanidad y buenas maneras para uso de la juventud de ambos sexos" , escrito por Manuel Antonio Carreño y editado en París en el año de 1892, conocido en el mundo del protocolo como el "Manual de Carreño" reeditado en numerosas ocasiones.

Lo depurado de su lenguaje y lo acertado de sus máximas y consejos hace que su lectura sea reconfortante, a veces desternillante y en no pocas ocasiones entristecedora, máxime cuando comprobamos cuánto ha perdido nuestra sociedad en materia de urbanidad y buenas maneras.

Dada la fecha de su publicación, no existe riesgo de que la SGAE me exija el diezmo, por lo que me propongo desgranar aquí, de cuando en cuando, alguno de sus mejores pasajes:

"El aseo es una gran base de estimación social, por cuanto revela en nuestras personas, como antes hemos dicho, la candidez del alma; porque comunica a todo nuestro exterior un aseo irresistible y porque anuncia en nosotros una multitud de buenas cualidades de que la pulcritud es un signo casi siempre infalible"

(Cap. II. Del aseo en general)


"Así como no debemos nunca entregarnos al sueño sin alabar a Dios y darle gracias por todos sus beneficios, lo que podría llamarse asearse el alma, tratando de despojarla por medio de la oración de las manchas que las pasiones han podido arojar en ella durante el día, tampoco debemos entrar nunca en la cama sin asear nuestro cuerpo; no sólo por la satisfacción que produce la propia limpieza, sino a fin de estar decentemente prevenidos para cualquier accidente que pueda ocurrirnos en medio de la noche."

(Cap. III. Del aseo en nuestra persona)


LFU

15 de enero de 2009

Merdellona


Siempre me ha gustado esta palabra, del más puro casticismo malagueño. En un diccionario malacitano, leí hace poco una buena definición:

Merdellón (del francés merd de gens): imposible de definir, hay que verlo. (Nota: la version femenina es imposible de no ver u oir).

Y es que la tenemos hasta en la sopa...

LFU

12 de enero de 2009

Un gesto noble


Mientras el Ayuntamiento de Sevilla, gobernado en la sombra por un personaje cuyo odio es aún mayor que su incompetencia –me refiero al comunista Antonio Rodrigo Torrijos- se dedica a eliminar de las calles los nombres de todo aquél que haya podido “contaminarse” con el régimen anterior, sustituyéndolas por las de personajes cuyos méritos para con la tierra de María Santísima son perfectamente descriptibles, como Pilar Bardem y José Saramago, no han faltado voces ni gestos de nobleza del pueblo de Sevilla en defensa de quien, como mi padre, dedicó ocho años de su vida a luchar por Sevilla con una pasión que aún perdura.

Hace unos días, apareció en el ABC de Sevilla la carta de un padre de 12 hijos agradecido y valiente. Dos adjetivos cada vez más extraños en nuestra sociedad. Aquí va:



La “vendetta” histórica.


Desde que ZP se inventara la discutible Ley de Memoria Histórica , todos los ayuntamientos “progres” de España iniciaron al unísono la limpia en los nomenclátor de los nombres que se distinguieran por sus cargos dentro del franquismo. Sevilla no podía quedarse atrás y enseguida, bajo la batuta del señor que fuma en pipa, la limpia se puso en marcha. Dentro de las calles, plazas y avenidas que se cambiarían de nombre, se encontraba la avenida de don José Utrera Molina, gobernador de Sevilla entre los años 62 y 69. ¿Se informó plenamente esa comisión, guiada por el rencor, sobre la vida y comportamiento del señor Utrera Molina durante los años de su gobierno?. Puede que algunos familiares de éstos si recuerden los muchos favores que a cambio de nada, realizara por Sevilla. El señor Utrera puede sentirse orgulloso de todo el bienestar que proporcionó a miles de sevillanos, siendo gran benefactor de las clases más humildes. Fue el principal valedor de acabar con la vergüenza de una mini-barriada de casitas bajas, y de la creación de uno de los barrios más populosos de Sevilla, el polígono de San Pablo, dando viviendas a las familias humildes. Yo, particularmente, soy un favorecido, por lo que no siento el menor reparo en predicar las bondades de este señor.

Apenas lo traté directamente, tan sólo una vez que fui a mi pueblo, Écija. Aquél año mi empresa me ofreció un traslado a Sevilla. Yo tenía 12 hijos y no podía despreciar la oportunidad de mejorar. Pero se me presentaba un gran problema: La vivienda. Sin pensármelo dos veces, le envié una carta al señor Utrera Molina exponiéndole mi problema. Apenas pasados unos días, un compañero de oficina me dijo: ``Te llaman del Gobierno Civil¨. Era el propio señor Utrera el que me comunicó: “Tengo un piso para usted de 180 metros, que su adjudicatario ha rechazado. Venga con su mujer, si les gusta, suyo es”.

Hace ya 41 años que estamos aquí, disfrutando de este piso en el polígono. Una pregunta ingenua: Habiendo favorecido el señor Utrera Molina a tantas familias, ¿cómo es que no se escuchan voces de protesta ante tal ignominia?


José López Farfán.Sevilla.

8 de enero de 2009

¿Probablemente Dios no existe?

Al hilo de la original campaña de marketing con la que, a fuerza de provocar a los creyentes, alguien o muchos se acabarán forrando, quisiera hacer algunas consideraciones:

“Probablemente Dios no existe”. La frase nos indica que, en contra de lo que se afirma, no estamos ante una campaña atea. El ateo niega la existencia de Dios, mientras que esta campaña únicamente la cuestiona en base una probabilidad indeterminada. ¿Y si existe?, se preguntarán los escépticos que la lean. Desde este punto de vista, el mensaje no es negacionista, sino que, por el contrario, contempla la probabilidad de Su existencia.

“Deja de preocuparte”. Personalmente, lo que me preocuparía –y mucho- es que no existiese. A los que creemos que Dios es Amor, no sólo no nos preocupa Su existencia, sino que gozamos de ella, pues en la fe encontramos el consuelo y la felicidad que la oscuridad e intrascendencia de la nada nunca puede ofrecer. Pero para los que albergan muchas dudas sobre Su existencia, la campaña es de lo más intranquilizadora: ya que estamos hablando de una mera probabilidad, ¿Debo preocuparme si existe?

“Disfruta de la vida”. El concepto de disfrute que subyace al anuncio es el de hacer lo que a cada uno le venga en gana en cada momento sin pensar en la existencia de límites, cortapisas o castigos divinos. Es el concepto egocéntrico y hedonista de la felicidad. ¿Se pretende decir que la existencia de Dios impide disfrutar de la vida? ¿Pero alguien piensa seriamente que la madre Teresa de Calcuta era infeliz? ¿Puede alguien disfrutar más de la vida que quien se entrega a los demás?. Una vez más, el mensaje es falso: no es más feliz quien más tiene, sino quien más da. Por otro lado, si consideramos que la muerte forma parte de la vida ¿Acaso no resulta angustiosa para los agnósticos y ateos la sensación de que después de la vida no hay nada, sólo el vacío?.

En cualquier caso, agradecería vuestros comentarios que seguro enriquecen esta entrada a vuelapluma.

LFU

4 de enero de 2009

Málaga y Utrera Molina (VI). Félix Gancedo

La abrumadora cantidad de cartas y artículos que han aparecido en prensa en los últimos dos meses en defensa de mi padre, me obliga a seleccionar. Las ha habido entrañables, como las de Delia de Toro y Gonzalo Fernández en ABC. Como lo es ésta, que he decidido colgar aquí por las bonitas y merecidas palabras que dedica a mi madre, callada y sufrida protagonista de toda esta historia.


HONOR A UN GRAN CABALLERO



Nací en “Málaga la Bella” hace ya 68 años. Mi padre y uno de sus hermanos hicieron la guerra en un bando; otros dos hermanos estuvieron en el otro. Con el pasar de los años fui adquiriendo conciencia de aquella triste realidad. Comprendí que la razón y la sinrazón de aquel magnicidio estaba posiblemente dividida en proporciones similares. Me di cuenta de que era un error creer en las siglas políticas, en los colores y en las direcciones. Mi conciencia me obligaba a creer en los seres humanos estuvieran donde estuvieran y sobre todo a creer en las personas de bien.

Corría el verano de 1948, fue en Alhaurin de la Torre donde conocí a Pepe Utrera Molina; por un camino de tierra iba paseando de la mano de una joven malagueña cuya belleza exterior solo ha sido superada a través de los años por su belleza interior; tuvieron ocho hijos. Querida Lali desde estas líneas te quiero rendir un sentido homenaje por lo mucho que has debido sufrir por tantas amargas realidades.

Fue en los Agustinos en 4º de bachillerato cuando de nuevo volví a ver a Pepe Utrera dándonos clases de política; hablándonos de la patria y de la unidad nacional. No recuerdo jamás haber oído a una persona tan enamorada de España. Nos enseñaba la grandeza de su historia y de su espíritu, nos enseñaba la unidad de sus pueblos y de sus regiones y sobre todo nos enseñaba lo importante que era ser español. Pepe con un entusiasmo sin igual no nos enseñaba solamente el amor a nuestro país, orientaba nuestras vidas, orientaba nuestros pensamientos hacía los grandes valores de los seres humanos, nos enseñaba el sentido del respeto y el de la lealtad, el sentido de la nobleza, de la honradez y de la honestidad; nos enseñaba el valor de lo moral, de la amistad y de la honorabilidad. En síntesis nos enseñaba a caminar por esta tierra sin dañar a los demás; con sus palabras nos enseñaba a ser hombres.

En su larga andadura política, Pepe Utrera se ocupó siempre de los mas necesitados, creó miles de viviendas para ellos, erradicaba el chabolismo; impulsó la seguridad social, creó la Universidad Laboral y un largo etc. Su verdadera trayectoria como político y como hombre no solo debe de servir como reflexión y ejemplo para muchos de nuestros actuales gobernantes sino que les aportaría una riqueza espiritual de gran valía. A España no se la quiere con la mente, se la quiere con el alma.

Sería una honra para Málaga tener políticos con la talla personal, con el talante y con el conocimiento que tenía y tiene el Excmo. Sr. D. José Utrera Molina. Pepe ha honrado a Málaga en su caminar por la vida; fue querido, reconocido y valorado allá donde estuvo por su profundo sentido de la bondad, de la honestidad, de la prudencia y de la justicia. Aquel malagueño que pueda pensar algo deshonesto ó indigno de Pepe Utrera es sencillamente porque no lo conoció ó quizás porque no ha sabido comprender que en el régimen anterior no todos eran malos, había muchos que querían a España y trabajaban para ella con decencia.

Amigos y amigas de esta querida Diputación, vosotros que hoy trabajáis para nuestra Málaga con ahinco y con la ilusión de ver cada vez mejor a sus preciosos pueblos y a sus gentes, os rogaría que pensarais por un momento si a alguno de vosotros se os concediera la medalla de nuestra provincia algún día, a vosotros que queréis honrar con vuestro esfuerzo a vuestros apellidos, a vuestros familiares, a vuestros amigos, vosotros que como yo estáis enamorados de Málaga y paseáis con orgullo su nombre, ¿que pensarìais, que sentiríais si a la edad de 82 años ya con hijos y nietos una nueva generación de malagueños que nunca os conocieron, pudiera quitaros ese símbolo tan querido como es ser Hijo Predilecto de tu Ciudad ó de tu Provincia?; que sin querer os robaran el recuerdo mas importante de vuestra vida. Que inmensa tristeza sentiríais sobre todo cuando ese gesto viene de los tuyos. Somos muchos, Pepe, los malagueños que sentimos que una vez mas y cuando ya estas en el último tramo de tu vida, te hayamos desgarrado el corazón.

Amigos y amigas de la Diputación con el paso de los años aprendí que solo los sabios saben rectificar de sus errores . Si tenéis el bello gesto de devolverle a Pepe Utrera sus honores no solo ganareis en reconocimiento y en respeto sino que tendreis el profundo agradecimiento de aquellos que valoramos a nuestros grandes hombres y a su historia; desde esta atalaya y con toda humildad os pido que no le quitemos ese honor a un gran caballero malagueño andaluz y español.


Félix Gancedo


Gracias de corazón, Félix, a quien no conozco, pero desde ayer me siento obligado.

LFU